La seguridad pública alcanza nuevas profundidades con buzos especializados

Ahora, los buzos especializados de los cuerpos de seguridad nacionales darán un paso más, gracias a la implementación del curso de buceo internacional de seguridad llamado ERDI. “Cuando las investigaciones llegaban al agua, se quedaban ahí. Ahora que nosotros podemos estar bajo agua, podremos documentar el fondo marino y las evidencias que ahí se encuentren; podremos fijar indicios, hacer fotografías y realizar todo ese trabajo de sitio de suceso criminal que antes no se hacía”, detalló.

Todo empezó en Sardinal de Guanacaste, cuando una empresa de buceo local llamada Vital Training Costa Rica se ofreció en 2019 como casa matriz para la capacitación del curso ERDI (Emergency Response Diving International por sus siglas en inglés), traducido al español como la certificación de Buceo Internacional en Seguridad Pública. No fue hasta este año que consiguió, finalmente, llevar a cabo la primera capacitación. 

“Nos hemos convertido en el primer grupo de Centroamérica en certificarse y recibir esta capacitación”, contó el agente judicial, quien participó en el primer curso impartido en suelo nacional, del cual participaron no solo agentes del OIJ como él, sino también funcionarios de la Cruz Roja.

Este certificado cumple con los más altos estándares internacionales de buceo de rescate, que consiste en un tipo de sumersión especializada y diseñada para las instituciones estatales, especialmente aquellas dedicadas a la atención de emergencias y a investigaciones policiales; no solo la Cruz Roja y el OIJ, también Guardacostas, Policía de Fronteras y Bomberos.

Funcionarios de la Cruz Roja durante la capacitación teórica del curso en 2021.

Dentro de las fuerzas de seguridad estadounidenses, que figuran como unas de las más avanzadas en la región, la capacitación ERDI tiene una aplicación generalizada. Además, al ser una norma internacional, quienes cuenten con ella podrán trabajar desde cualquier parte del mundo. “Hay estándares que, por ejemplo, si yo viajo a otro lugar y trabajamos este sistema, cada quién sabe qué debe de hacer y cómo hacerlo”, señaló Flores.

Agentes como Flores ya han sido invitados a participar en indagaciones para casos nacionales: “hubo un caso de narcotráfico en la Zona Sur del cual participamos como apoyo, también fuimos a la región Bribri para ayudar a rastrear una playa en busca de un arma de fuego”, detalló. Más adelante, los agentes del OIJ



también podrían colaborar con la Policía de Control de Drogas en la revisión de cascos de las embarcaciones, donde los llamados ‘narcobuzos’ enganchan paquetes de droga para el trasiego marítimo.

“Todo este esfuerzo es mancomunado e interinstitucional, no vamos a trabajar solos, vamos a unificar el estándar de trabajo con este sistema que existe desde hace más de 20 años”, aseguró el agente judicial.

Si antes era necesario contar con la ayuda de cruzrojistas para buscar un cuerpo desaparecido dentro de alguna masa de agua, ahora habrá buzos capacitados no solo para encontrar el cuerpo, sino también para preservar las evidencias que pudiera haber dejado en el fondo acuífero y así obtener más información para las pesquisas criminalísticas.

El instructor chileno de la certificación ERDI, Sergio Berdugo Varela.

En las localidades costeras también supondrá un alivio ante posibles casos de accidentes acuáticos y ahogamientos, ya que ahora los funcionarios de los cuerpos de respuesta podrán capacitarse, independientemente de su rama, bajo un mismo estándar para atender las emergencias.

Ya se han celebrado dos cursos en Guanacaste, y el próximo se llevará a cabo en marzo de 2022.