"Tortugo" cambió la fiesta por la cría de animales
Era un tomador de licor empedernido hasta que un accidente cambió su manera de ver la vida.
La vida de Carlos Alpízar cambió radicalmente un 30 de diciembre de 2005.
"Tortugo", como es conocido por su aspecto grande y robusto, era un tomador empedernido de licor. Trabajaba en una fábrica de alimento en San Miguel de Turrúcares, Alajuela, y el mismo vicio lo condenó a que le amputaran una pierna.
Esa noche estaba oscura y él estaba comenzando a beber alcohol durante una fiesta de fin de año, hasta que un choque frontal le imposibilitó volver a caminar de la misma forma en que lo hacía.
Por su condición, recibió una pensión por invalidez y, a partir de ese momento, su vida cambió. Actualmente, sus hábitos son otros, tan es así que su esposa considera que empezó desde cero un nuevo matrimonio.
La vida de "Tortugo" cambió para bien: empezó a tener tiempo de calidad, compró animales como cerdos, pollos y cabras, y ahora, en el pueblo, todos lo conocen porque pasa viajando en moto en busca de alimento para sus animales.
Repase su historia en el video adjunto.
