Por AFP Agencia |17 de mayo de 2022, 17:05 PM

Rusia anunció el martes la rendición de 265 soldados ucranianos atrincherados en la planta siderúrgica de Azovstal, último reducto de resistencia en la ciudad portuaria de Mariúpol, en el sureste del país, y se prepara para “una operación militar a largo plazo”, según el Ministerio de Defensa ucraniano.

Moscú afirma desde abril que controla esa estratégica ciudad portuaria tras un asedio de varias semanas. Sin embargo, cientos de soldados ucranianos seguían atrincherados en los túneles bajo la enorme zona industrial de Azovstal, cercada por las tropas rusas.

Según el Ministerio de Defensa ruso, 265 soldados ucranianos se han rendido, entre ellos 51 heridos que fueron trasladados a un hospital de la región de Donetsk, en el este de Ucrania, controlada por los rebeldes prorrusos. 

Moscú no precisó si los soldados serán tratados como criminales o prisioneros de guerra. Pero el presidente ruso, Vladimir Putin, "garantizó que serían tratados de acuerdo con las leyes internacionales pertinentes", según dijo el portavoz del Kremlin, Dmitro Peskov. 

El Ministerio de Defensa ucraniano confirmó que los soldados habían salido del área de Azovstal y expresó su esperanza de que se lleve a cabo un "procedimiento de intercambio (...) para repatriar a estos héroes ucranianos lo antes posible".

La viceprimera ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, también se refirió a un intercambio, pero solo en relación con "52 soldados gravemente heridos". "Cuando su estado se haya estabilizado, los intercambiaremos por prisioneros de guerra rusos", dijo en Telegram.

Según el Ejército ucraniano, la resistencia en la acería permitió retrasar el traslado de 20.000 soldados rusos a otras partes de Ucrania e impidió que Moscú capturara rápidamente la ciudad de Zaporiyia, en el sur.

"Gracias a los defensores de Mariúpol, Ucrania obtuvo un tiempo vital para acumular reservas, reagrupar y movilizar fuerzas y recibir ayuda de los aliados", según el Ministerio. 

Por su parte la Corte Penal Internacional (CPI) en La Haya anunció el envió a Ucrania de un equipo de 42 expertos, el máyor en la historia de la institución, para investigar las acusaciones de crímenes de guerra cometidos durante la invasión rusa.

"Intentar seguir vivo"

Ucrania está resistiendo más de lo que se esperaba ante las tropas rusas, con la ayuda de armas y dinero de sus aliados occidentales. 

En una conversación telefónica con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, el presidente francés, Emmanuel Macron, prometió intensificar la entrega de armamento y material humanitario a Ucrania "en los próximos días y semanas". 

Poco tiempo después, el líder ucraniano abrió el 75ª Festival de Cannes, donde pidió el compromiso del mundo del cine en contra de "los dictadores".

Tras rodear la capital, Kiev, en las primeras semanas de la guerra, Moscú concentra ahora su ofensiva en la región de Donbás, en el este, fronteriza con Rusia.

El Ministerio de Defensa ucraniano señaló que las tropas rusas llevan a cabo "ofensivas a lo largo de toda la línea de contacto" en la región de Donetsk, y parcialmente en la vecina Lugansk.  

Según Kiev, las tropas rusas se retiran de los alrededores de Járkov, la segunda ciudad más grande del país, para desplegarse en el Donbás. 

Pero pese al repliegue ruso, los habitantes de los pueblos destruidos por los combates alrededor de Járkov aún recuerdan lo que vivieron.

Rostislav Stepanenko, de 53 años, relató a AFP cómo sobrevivió a un devastador bombardeo en Ruska Lozova, atrapado en la línea de fuego entre las fuerzas rusas y ucranianas.

Este hombre ironizó que su oficio era "intentar seguir vivo". "Con suerte, llegaré a los 54 años", dijo con una sonrisa nerviosa.

​"Fase prolongada" 

"La guerra entra en una fase prolongada", aseguró el ministro ucraniano de Defensa, Oleksiy Reznikov, a sus pares de la Unión Europea y al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. 

"Rusia se prepara para una operación militar a largo plazo", agregó, recordando que el objetivo de Moscú era "crear un corredor terrestre que une a Rusia con Crimea", la península que se anexionó en 2014 y ocupar la "totalidad del sur de Ucrania". 

El gobernador regional de Lugansk, Sergii Gaiday, sostuvo que las tropas rusas estaban "bombardeando Severodonetsk sin parar" y aseguró que dos edificios del hospital general de la ciudad habían sido alcanzados durante la noche. 

"Tenemos diez muertos y tres heridos en la región", escribió en  la plataforma Telegram. 

La toma de Severodonetsk, la ciudad más al este en poder de las fuerzas ucranianas, permitiría a Rusia el control de facto de Lugansk, una de las dos regiones, junto con Donetsk, que forman el Donbás.

En Donetsk, siete civiles fueron abatidos "por los rusos" y otros seis resultaron heridos, aseguró también en Telegram su gobernador, Pavlo Kyrylenko.

Más al norte, ocho personas murieron y 12 resultaron heridas en ataques rusos contra la localidad de Desna, en la región de Chernígov, al norte de Kiev, informaron los servicios de emergencia.

Y en el oeste, los bombardeos alcanzaron una instalación de infraestructura militar fronteriza con Polonia, según la administración militar regional de Leópolis. 

Más al sur, Odesa y Mykolaiv también fueron atacadas, con víctimas en ambas ciudades, informó el mando del Ejército en el sur. 

Frente a la invasión rusa, Suecia y Finlandia están a punto de renunciar a décadas de no alineamiento militar y el miércoles presentarán sus candidaturas a unirse a la alianza de la OTAN. 

Este martes el Parlamento de Finlandia --país que comparte una frontera de 1.300 kilómetros con Rusia-- votó por abrumadora mayoría a favor de unirse a la alianza.

El presidente ruso declaró el lunes que la medida no representa "una amenaza directa para nosotros (...) pero la expansión de infraestructura militar a estos territorios va a generar ciertamente una respuesta nuestra" . 

En el plano comercial y de sanciones, la petrolera italiana Eni anunció la apertura inminente de una cuenta en euros y otra en rublos ante el banco ruso Gazprombank para pagar el aprovisionamiento de gas, acatando las exigencias de Moscú.

"La obligación de pagos puede cumplirse mediante la transferencia de euros" y ese procedimiento "no debería ser incompatible con las sanciones" impuestas por la Unión Europea (UE), sostuvo ENI.