Pasaron 10 días para que Acueductos y Alcantarillados (AyA) diera luz verde a los vecinos de Calle Roble y Calle Cementerio de Desamparados, en San José.
Malos olores en el agua provocaron varios análisis del líquido durante todo este tiempo.
De acuerdo con la institución, después de mejoras en el acueducto, un lavado de tubería y análisis de laboratorios se habilita el uso de la red de abastecimiento de agua.
Fue el pasado 15 de marzo cuando el AyA prohibió consumir agua ni utilizarla para preparar alimentos y tampoco para higiene personal.
Se repararon dos fugas y se le hizo análisis de laboratorio al agua para descartar alguna contaminación.
Durante todo este tiempo los vecinos mantuvieron reportes de olores extraños y se alertó de no consumirla, pero fue este lunes 25 de marzo cuando se les comunicó a los vecinos que ya pueden volver a utilizar el preciado líquido.
Un médico especialista explica detalladamente lo que sucede en el cuerpo y el tiempo en el que una persona debería de estar en reposo, dependiendo del tipo de alimento que haya ingerido, antes de hacer actividades acuáticas.