POR Luanna Orjuela Murcia | 17 de enero de 2022, 14:41 PM

Las personas no vacunadas contra el COVID-19 tienen 8.6 veces más posibilidades de requerir hospitalización en cuidados intensivos y 3.68 veces más probabilidades de morir, según datos del Subárea de Vigilancia Epidemiológica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).

La CCSS reportó el pasado 11 de enero a 212 pacientes hospitalizados por COVID-19, 150 en salón y 62 en unidades de cuidados intensivos (UCI).

La licenciada Susana López Delgado, jefa de la subárea de Análisis Estadístico, explicó que los datos demuestran que contar con el esquema de vacunación completo constituye un elemento efectivo que disminuye la necesidad de requerir cuidados intensivos.

Por ejemplo, una persona con esquema completo de vacunación permanece en promedio nueve días hospitalizada versus una persona sin vacunas, cuyo plazo se amplía hasta 32 días.

"Los datos muestran que, entre quienes estaban internados en UCI, el 27,4% no se encontraban vacunados, mientras que el 4,8 % tenía su esquema de vacunación incompleto y el 1,6% tenían menos de 15 días de haber recibido su vacuna; es decir, sus organismos se encontraban en proceso de desarrollar las defensas contra el COVID-19", señala el estudio de la CCSS.

Epidemiólogos coinciden

Al consultarles a los epidemiólogos Juan José Romero y Roberto Salvatierra sobre si la vacunación ha influido en que haya menos personas hospitalizadas por COVID-19, ambos coinciden en que sí. 

"Aparentemente, las vacunas están haciendo un trabajo bastante bueno previniendo los casos graves de la enfermedad. Entonces se observa que las personas vacunadas afectadas por la variante Ómicron tienen un riesgo bastante menor, de ser internadas, si se compara con personas no vacunadas. Esto quiere decir que, efectivamente, tanto el hecho de que la variante sea menos virulenta como el hecho de estar con un esquema completo y ojalá con un refuerzo, reduce sustancialmente los internamientos", comentó Juan José Romero de la Universidad Nacional (UNA).

Así también lo concluyó Roberto Salvatierra, de la Universidad Hispanoamericana: "La vacunación ha evitado que personas terminen enfermos de gravedad por Ómicron o Delta (sabemos que a nivel nacional tenemos 50% de cada una). Como hay una gran parte de la población vacunada, eso ha hecho que la hospitalización haya disminuido de manera importante. Hemos visto que entre más personas de un grupo etario esté vacunada, vemos donde cae las hospitalizaciones".

Menos virulenta

Otro aspecto muy importante que ayuda a explicar por qué hubo una explosión de contagios de COVID-19, pero no una de las hospitalizaciones es que Ómicron es menos virulenta, pero más contagiosa.

"En efecto las hospitalizaciones en el mundo entero y no solo en Costa Rica, se han reducido sustancialmente por esta ola de la variante Ómicron. Esto porque la variante es aparentemente menos virulenta. Esto quiere decir que por la forma clínica que produce, el virus se aloja y se reproduce en las vías aéreas superiores y no busca los pulmones, entonces, las neumonías y la reacción inflamatoria severa que se observa con las variantes previas, no se da con Ómicron, entonces esto reduce bastante la cantidad de hospitalizaciones", acotó Juan José Romero.

Roberto Salvatierra terminó de reforzar este argumento: "Ómicron es una variante que nos dimos cuenta que es una unión entre COVID-19 y un resfrío común por eso cambió la sintomatología. Ómicron no se reproduce dentro de los pulmones, sino que se reproduce en el tracto respiratorio alto (laringe, boca, senos nasales, etc.), lo cual ha hecho que la variante sea menos problemática y mortal".

Más asintomáticos 

Romero explicó que es de esperarse que personas con el esquema completo de vacunación lidien con la infección de una manera muy leve o inclusive asintomática. 

"Es probable que se sume de nuevo la virulencia baja y un buen estado inmunológico producto de la vacunación o incluso por infecciones previas. Y entonces las personas no muestren síntomas o que los síntomas sean tan leves que hasta los pasen por alto", acotó Romero.

Por eso recalcan la importancia de continuar con las medidas de prevención como el uso de la mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento social.

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