POR Iván Meza | 10 de diciembre de 2014, 17:09 PM

El llamado “botón de pánico” es parte del nuevo sistema de cámaras de transmisión en vivo que podría convertirse en la nueva arma de los taxistas.

Consiste en cuatro cámaras de vigilancia que graban y transmiten en tiempo real el audio y el video de todo lo que ocurra dentro del vehículo.

La señal es monitoreada por una central que también ubica el carro en el mapa.

Si al taxista lo asaltan o está en peligro, presiona el botón de pánico y alerta a la central para que acudan en su auxilio.

El plan piloto lo aplica Coopeirazu con la empresa Desca. El servicio cuesta ₵2.500 por día.