Gran Final explosiva: MQB presentó gala ambiciosa entre despedidas y causas sociales
Repase aquí cómo se vivió el cierre de la segunda temporada del 'reality'.
POR Mariana Valladares | 30 de noviembre de 2025, 21:30 PM
La doceava y última gala de la segunda temporada deMira quién baila (MQB) Costa Rica se vivió este domingo 30 de noviembre como un estallido de emociones, técnica y espectáculo.
Con el trofeo frente a ellos —y la responsabilidad de representar a organizaciones benéficas— los cuatro finalistas llegaron decididos a entregar la mejor noche de sus vidas.
La producción llevó la escala al máximo: fuego real, portales LED, mesas, sillas, tarimas de llantas, barras de ballet, capas, aros, utilería temática y despliegues tecnológicos que hicieron de cada número una experiencia completamente distinta. El estudio se convirtió en una máquina de mundos, donde cada coreografía narró una historia propia.
Mariana Uriarte ganó la segunda temporada de Mira quién baila (MQB) Costa Rica con el 39,17% de los votos del público. El segundo lugar lo logró Ítalo Marenco con 38,57% del apoyo.
"Jeff-On" obtuvo el tercer lugar con el 15,31% de los votos. Ericka Morera aseguró el cuarto lugar de la competencia con el 8,95% del apoyo emitido durante esta última semana de competencia.
Además del título, cada pareja bailó en nombre de una causa.
El primer lugar recibirá $15.000 para su causa social, el segundo $7.000, el tercer puesto $5.000 y el cuarto lugar $3.000.
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El premio del primer lugar es de $15.000. Ahora la maquillista donará esta suma a la fundación que ha apoyado durante toda la temporada, Centro Canaan de Hogares de Rehabilitación Zoé.
"Keka" Morera y Javier Acuña: sabor, fuerza escénica y un cierre explosivo
La pareja abrió la final con un merengue con Rompecintura, un arranque donde la energía fue el centro de todo. "Keka" llegó desatada, disfrutando cada acento, mientras Javier Acuña sostuvo la estructura técnica.
"Estoy muy feliz de verte bailar este merengue con esta energía, actitud y potencia. Siempre te he animado a estar segura... Te veía ligeramente desequilibrada y hoy te he visto equilibrada y con una actitud de ganadora. Encantada de verte bailar", recalcó el juez español Isaac Rovira.
Más tarde regresaron con un reguetón al ritmo de La plena y Que tire pa’ lante, apoyados por fuego y cuatro extras. La dupla convirtió el escenario en una fiesta sin frenos, con fuerza corporal, picardía y un dominio absoluto de la musicalidad urbana.
El juez español Toni Costa destacó el desempeño de Acuña alabó "el trabajo constante de ambos". Recalcó que Ericka desde el día uno ha aceptado los comentarios, los ha tomado en cuenta y su curva de aprendizaje ha sido significativa.
Su tercera presentación fue uno de los momentos más teatrales de la noche: lady style con Pussycat Dolls Mix, acompañado de barras de ballet y un triángulo escénico. "Keka" encarnó un personaje completo: felina, elegante y precisa. Fue su performance más pulida, demostrando que su crecimiento a lo largo de la temporada fue real y sostenido.
"Has demostrado dentro y fuera de la pista, que eres una persona extraordinaria y eso es parte del arte. Para ser un buen artista, hay que ser una buena persona", concluyó el juez Astorga.
Mariana Uriarte y Michael Rubí: intensidad, control y una avalancha de estilos
La maquillista y su pareja técnica llegaron a la gran final dispuestos a contraatacar con versatilidad.
Su primera presentación fue un tango–contemporáneo con Crazy in Love, acompañados por una mesa larga y varias sillas en escena. La propuesta fue oscura, marcada y teatral. Mariana sacó su lado más serio: líneas limpias, fuerza interpretativa y un carácter que sorprendió incluso a quienes ya la daban como favorita.
La jueza Isabel Guzmán destacó que desempeño de Uriarte durante toda la temporada y dijo que es gusto verla bailar.
Luego llegó un merengue con El Virao, donde la energía latina volvió a emerger junto a cuatro extras. Fue alegre, rápido y muy conectado. Esta es la segunda vez que la pareja presentó esta coreografía.
"Ustedes dos han sido sinónimo de excelencia desde la primera gala y lo han tenido hasta hoy, este merengue lo vuelve a confirmar. Una conexión divina con el público, solo me queda felicitarlos a ustedes dos y agradecerte Mariana por tomar el riesgo de estar aquí", expresó el experto tico Astorga.
La tercera coreografía fue uno de los momentos visuales más contundentes de la final: bollywood con Friend Like Me, con ropero y elementos típicos de India como soporte escénico. Mariana brilló con expresividad facial, manos detalladas y precisión en ritmos que exigen exactitud. Fue un número lleno de color, carácter y celebración.
"Hoy me reafirmó, vuestro show, espectáculo, es incomparable. Es un regalo para la vista y los oídos. La coreografía, la energía... Terminaste en esta Gran Final dejando toda la energía. Muchas felicidades a las dos. Y Michael, no hay un genio mejor que tú", terminó Rovira.
Ítalo Marenco y Lucía Jiménez: potencia, precisión y los contrastes más marcados de la noche
La dupla arrancó con el clásico Mambo #8, utilizando un aro y cuatro extras para construir un ambiente retro festivo. Ítalo mostró confianza, limpieza y un manejo corporal mucho más centrado que en semanas anteriores.
Los jueces alabaron la energía con la que se presentaron y el compromiso de Marenco durante esta presentación y toda la temporada.
Su segunda coreografía fue un giro total: paso doble con La Malagueña, acompañado por una capa imponente.
Fue dramatismo puro: líneas largas, autoridad en cada paso y una presencia que ocupó todo el escenario. Con esta coreografía lograron el Premio Wow en la sexta gala del programa.
"Creo que es uno de los mejores bailes que has visto en la temporada y volverla a ver fue bonito, divertido, dinámico... Aparte de eso, quiero darles las gracias por esa energía que han mantenido, que ha enganchado a la gente.
"Te agradezco tanto lo bien que me lo he pasado contigo. Te deseo lo mejor, porque realmente te lo mereces", expresó el juez Isaac Rovira.
El momento más emocional de la pareja llegó con un contemporáneo con Bring Me Back to Life, sostenido por un portal con luces LED y cuatro extras. La puesta logró una atmósfera casi cinematográfica: Ítalo bailó desde el pecho, con vulnerabilidad y fuerza. Un cierre perfecto para su arco de transformación.
"Qué manera de cerrar la final. Tengo que decirte, este carisma y energía han sido inspiradores", dijo Toni Costa.
"Jeff-On" y Alhana Morales: carisma, poder urbano y una final de pura celebración
Los representantes de Pollitos de Hierro iniciaron con un reguetón con La Gasolina, apoyados por fuego, tarimas de llantas y cuatro extras.
Fue un estallido urbano: explosivo, fuerte y con esa personalidad que ha caracterizado a "Jeff-On" toda la temporada, según expresaron los jueces en sus comentarios.
Su segundo número fue un paso doble con Que viva España, donde mostraron una sorprendente autoridad escénica y líneas mucho más firmes. La química entre ambos fue uno de los puntos altos de la noche.
"El viaje que has tenido es magnífico, impresionaste. Esta coreografía, las líneas, la suavidad... Te felicito. Yo espero que la vida me comparta la oportunidad algún día de compartir con vos escenario", ratificó Isabel Guzmán.
Para cerrar, presentaron uno de los números más espectaculares de la final: Fergie – A little party never killed nobody, acompañados por un montaje “Matrix”, mesa y sillas en escena. Fue fiesta, glamour, precisión y show puro. Un cierre de temporada a la altura de su carisma natural.
"No solo eres cantante, también eres actor y de repente te has transformado en un gran bailarín y he tenido el honor de conocer a una gran persona", finalizó Rovira.
La gala 12 de MQB fue un despliegue de contraste, personajes y técnica, donde cada pareja apostó por demostrar no solo evolución, sino también compromiso con sus respectivas causas.
El público, nuevamente determinante, enfrentó una decisión dificilísima entre cuatro propuestas sólidas, emotivas y completamente distintas.
La temporada cerró con su gala más ambiciosa: más fuego, más riesgo, más escenografía, más emoción.
Una conclusión perfecta para un formato que año con año demuestra que el baile tiene el poder de transformar vidas dentro y fuera de la pista.