Por Janeth Valverde |17 de junio de 2022, 20:22 PM

Uno de los pescadores que fue rescatado tras estar más de tres días flotando en aguas del Pacífico, narró los momentos de angustia que vivió.

La búsqueda continúa, pues aún no logran ubicar al otro tripulante que también iba en la lancha.

“Amor, amor, nos estamos hundiendo, ya nos hundimos, estamos naufragando mi amor aquí, llamen a la naval, ya le dije a Kevin, estamos acá por el cabo, nos hundió el mal tiempo”, esta fue la alerta de auxilio que logró enviar el pescador de Puntarenas, Alejandro Pérez Gutiérrez a su esposa.

Esto luego de que él y otro tripulante fueran golpeados por una ola cuando estaban en el mar.

El incidente ocurrió el fin de semana anterior. El hombre estuvo más de tres días naufragando y a la espera de ser rescatado.

“Yo le dije al compañero que se aferrara a las boyas, ahorita viene la naval a buscarlo, pero nunca llegaron, fueron las cuatro de la tarde y nada, pasó la noche, amaneció, volvió a anochecer, eran tres noches de tragedia, ya iba para la cuarta cuando el barco que venía de Colombia me rescató y aquí estoy gracias a Dios”, relató Alejandro Pérez.

El rescate ocurrió gracias a una embarcación extranjera que lo logró divisar a la deriva, lo atendió y lo trasladó a Nicaragua. Ahí estuvo hospitalizado y este viernes llegó a Costa Rica, se recupera en su casa junto a su familia en Puntarenas.

“Era como estar viendo la película 'Tormenta perfecta', olas inmensas, algo impresionante, yo no pude escalar las olas, se metió una, se metió la otra y nos hundió, naufragamos y fue terrible, tres días de mal tiempo, estaba a millas de la costa, ya estaba en aguas muy abiertas, en aguas frías”, agregó el pescador.

Según Guardacostas, aún mantienen la búsqueda para dar con el otro tripulante desaparecido.

Se trata de un nicaragüense, que salió por primera vez a pescar junto con don Alejandro. Lamentablemente, aún no hay rastros de él.

Don Alejandro se ha dedicado a la pesca desde hace años, y asegura que ha naufragado en al menos ocho ocasiones.

Reitera que una vez más fue producto de un milagro. Y agradece a Dios poder contar nuevamente su historia al lado de sus seres queridos.