Por Christian Montero |23 de septiembre de 2022, 22:45 PM

La familia de una joven madre asesinada en Corredores está indignada tras conocer que el sospechoso quedó libre.

El crimen de Rosemary Rojas Rojas trascendió el fin de semana cuando encontraron su cuerpo en una plantación de palma aceitera en el lugar conocido como Kilómetro 24 de Corredores, Puntarenas.

La última vez que Rosemary fue vista con vida, estaba en compañía de su pareja sentimental, con quien tenía una relación desde hace cuatro meses.

Poco después, el sospechoso del femicidio se entregó y en las últimas horas se conoció que el imputado quedó libre y solo le impusieron como medidas cautelares, pese a que la Fiscalía solicitó seis meses de prisión preventiva.

El imputado debe mantener domicilio fijo y firmar cada 15 días en la delegación de Fuerza Pública de Osa.

La familia de Rosemary está indignada por esa decisión, ya que temen que el sospechoso tome represalias contra ellos.

“Pedimos que se haga justicia, la jueza decide darle domicilio fijo y que pueda andar libremente, no le dio prisión preventiva, es duro, ya uno no sabe”, explicó María Rojas, su hermana.

Rosemary tenía 33 años, vivía en Cariari de Laurel en Corredores y era madre de dos menores de 7 y 14 años, quienes dependían por completo de la joven.

Este viernes, en Río Claro de Golfito, ocurrió otro femicidio cuya víctima fue Ester Hernández González de 47 años, la policía detuvo a un hombre de apellido Hernández como sospechoso del crimen.

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