Por Greivin Moya |13 de octubre de 2020, 7:46 AM

La gestión en la construcción de la carretera entre playa Naranjo y Paquera en la Península de Nicoya sigue dando de qué hablar, su planificación y desarrollo es más que deficiente. Una obra importante, pero pareciera que las autoridades no le ponen la atención que merece.

Esta carretera de 21 kilómetros con un costo superior a los 27 millones de dólares, o sea, más de un millón de dólares por kilómetro, con tres puentes, ya casi cumple el año de atraso.

El financiamiento de la obra se hace con un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo, que tendremos que pagar todos nosotros con los intereses y las multas respectivas cuando no se cumple con lo pactado.

Esta obra, en su plazo inicial, debió haberse entregado en setiembre del año pasado, pero la fecha de entrega se ha modificado en cinco ocasiones y la última fecha que se aprobó por parte de la administración adscrita al MOPT es para el 19 de octubre de este año; según orden número 16 de ampliación del plazo.

Pero todos los vecinos e interesados en ver concretado el proyecto califican como un juego los compromisos de conclusión de la obra, pues no se cumplen. Como hemos dicho, se van ampliado sin tener certeza clara de cuándo estará terminada la obra. Un asunto que refleja la pésima gestión, pues eso crea incertidumbre que repercutirá tarde o temprano en los costos y en las expectativas de la obra. 

Ni se diga de la credibilidad de los vecinos y comités que ha presionado para construir la carretera, porque todos concluyen que una obra no puede ser seria y responsable cuando no se tiene claro cuándo se va a terminar.

Las razones del porqué no se ha terminado la obra han sido varias y en cada una de las cinco ampliaciones se presentan justificaciones que son reiterativas. Han sido por lluvias, porque no se reubicaban los postes del tendido eléctrico y otros servicios, también por el eterno problema de expropiaciones que no estaban listas y algunas siguen pendientes. Estas razones han provocado, según los documentos, que la empresa constructora no avance conforme al cronograma, por esos    se le han compensado días que suman casi un año de atraso.

Observe todos los detalles en el video adjunto.