Por Juan José Herrera |6 de junio de 2024, 14:47 PM

La reunión de este jueves entre las autoridades del Poder Ejecutivo y las jefaturas de la Asamblea Legislativa terminó de aclarar la ruta que seguirá el proyecto de referendo presentado este miércoles por el presidente Rodrigo Chaves.

En la cita, celebrada en Casa Presidencial, el mandatario y parte de sus jerarcas dejaron claro que el proyecto presentado, que en su mayoría reforma artículos referentes al control y fiscalización de la Contraloría General, no se puede modificar, por lo que el único trabajo del Congreso será decidir si apoya o no que el texto vaya a consulta popular.

“Sentimos buena voluntad de los jefes de fracción y el presidente del Congreso para avanzar en una ruta, no hay plazo, pero para que esto se pueda discutir muy pronto. El fondo del proyecto es un tema que la misma ley no habilita que puede ser modificado, pero sí la forma; es decir, si hay algún tema de vicio en la forma del mismo proyecto habrá que ver cómo lo manejemos”, dijo esta tarde la ministra de la Presidencia, Natalia Díaz.

En la cita, donde también estuvo presente el presidente del Congreso, Rodrigo Arias, se aclaró además cuál es el procedimiento que se seguirá para esa discusión final.

Arias precisó que ya el texto se mandó a publicar en el diario oficial La Gaceta y que, concluido esto, él se encargará de definir la fecha en que se someterá a votación en el Plenario: será una única votación y se necesitará el apoyo de al menos 29 diputados para aprobar la realización del referendo.

Si se aprueba, el texto pasará a manos del Tribunal Supremo de Elecciones y este lo consultará a la Sala Constitucional, según indicó Arias.

Agenda

El otro tema de la reunión de este jueves fue la definición de una agenda conjunta que agrupe las prioridades del Ejecutivo y la visión de las diferentes fracciones para el periodo de sesiones extraordinarias que arrancó en mayo pasado.

La ministra Díaz aseguró que la próxima semana, junto al presidente Chaves, se analizarán tres propuestas de cada fracción y las iniciativas que interesan al Gobierno para así convocar una agenda que concentre el trabajo del Congreso en el próximo mes y medio.

La jerarca aprovechó para referirse a las críticas que la bandada del Liberal Progresista ha hecho sobre la no convocatoria de ninguno de sus proyectos a estas sesiones.

Insistió en que el análisis y la definición de esa agenda no pasa por la fracción que presenta el proyecto, sino cómo empatan esas propuestas con los intereses del Ejecutivo.

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