Por Juan José Herrera |5 de octubre de 2022, 16:01 PM

Pese a la reiterada urgencia del Gobierno por aprobar el proyecto de los eurobonos, la iniciativa sumó una semana más sin salir de la Comisión de Asuntos Económicos.

Esta tarde, los mismos diputados que apoyan la emisión de los $6 mil millones que quiere el Poder Ejecutivo se encargaron de agotar el tiempo de discusión sin dictaminarla, defendiendo el rechazo de un texto sustitutivo que ni siquiera es la propuesta final.

Esa actitud molestó a la presidenta del órgano, Vanesa Castro (PUSC), quien dijo no entender lo que sucedía.

“Díganme qué es lo que pasa porque no entiendo por qué se está hablando tanto. Si hay un compromiso, díganme que no lo vamos a hacer hoy, díganmelo transparentemente: ‘no vamos a votar hoy’.

“Porque yo no entiendo que se esté gastando el tiempo hablando innecesariamente de un texto que ya pasó, que ya fue superado, entonces yo quisiera que de manera transparente me digan ‘no vamos a votar hoy’. No entiendo, los que está hablando son los que necesitan que se vote, entonces esta presidencia se siente confundida”, dijo la socialcristiana.

La crítica iba dirigida a Gilberto Campos (PLP) y a la liberacionista Carolina Delgado, ambos parte de la reunión paralela que el Ejecutivo mantuvo con algunos miembros de la comisión y que molestó a los restantes integrantes del órgano.

“Explicar (su punto) en 15 minutos o menos no es suficiente, es necesario desde mi perspectiva explicar por qué se cambió, no es un asunto de dilación, es un asunto de responsabilidad”, argumentó Campos, quien en todo momento justificó por qué él y el PLP cambiaron de opinión y decidieron apoyar la emisión de $6 mil millones que tanto criticaron él y su jefe de fracción, Eliécer Feinzaig.

A la comisión incluso llegó la oficialista Pilar Cisneros, quien no forma parte del órgano, y que pidió la palabra como una cortesía parlamentaria para defender la urgencia del Gobierno e insistir en que esta posición está respaldada por entes especializados como el propio FMI.

Su intervención, sin embargo, fue cuestionada también por otros diputados como una medida dilatoria y una intención solapada de no votar el proyecto este miércoles, tal y como estaba previsto.

El texto sustitutivo que se quiere aprobar permitiría la emisión de $6 mil millones y la entrega de esos dineros al Gobierno en tractos, pero condicionado por la disminución nominal de la deuda pública, la reducción en el pago de intereses y la generación de un superávit primario (sin contar intereses) todos los años.

El proyecto, según Hacienda, debería estar aprobado antes del “Día de Gracias” (24 de noviembre) porque, después de esa fecha, los mercados e inversionistas entran en un periodo de vacaciones; sin embargo, con el dictamen pendiente y las dos votaciones en el Plenario por delante, esa fecha se vislumbra complicada.


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