Por Juan José Herrera |16 de junio de 2022, 13:44 PM

El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Wálter Espinoza, arremetió hoy contra la ley que legaliza el uso y comercio del cáñamo industrial y el cannabis medicinal en Costa Rica.

Ante los diputados de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico, el jerarca cuestionó que la forma en que se aprobó la ley hace imposible determinar qué es cáñamo y qué marihuana; y que, bajo esa realidad, las autoridades solo tendrán dos posibilidades: decomisar todo o legalizar la marihuana.

La razón, desde una explicación técnica, es que, según Espinoza, la ley costarricense establece como un elemento diferenciador la presencia de tres ingredientes activos: Delta 8, 9 y 10, cuando a nivel internacional solo se exige el 9.

“El 10 prácticamente solo existe en la literatura y el 8 es muy difícil de distinguir; entonces, cuando vaya un camioncito cargado de cáñamo, la Policía lo va a tener que decomisar y lo va a tener que llevar al laboratorio para que nos diga si es cáñamo o marihuana, y el laboratorio nos va decir, que no sabe porque la ley exige delta 10 y el delta 10 no existe.

“Eso va a generar problemas, pero el problema más grave para el OIJ es que nos va a atribuir a nosotros la determinación de qué es lícito y no es lícito y eso no puede ser, eso le toca al Estado”, dijo Espinoza.

El director sostuvo que esa realidad los pone en una encrucijada, porque en el mundo no existe un laboratorio que pueda distinguir ambos y que ellos no tienen un método de comparación eficaz, como sí sucede, por ejemplo, con la cocaína o la heroína.

“Esta ley significa dos cosas: que el OIJ y el Ministerio Público van a afectar los intereses comerciales o que se legalizó la marihuana, porque nunca se va a poder establecer que existe delta 10, no hay método de comparación como pasa por ejemplo con la cocaína.

“Entonces vamos a llenar las bodegas de cáñamo o marihuana, porque no sabemos qué es, y las personas que se dedican a esto de manera lícita no van a poder hacer nada, pero los que se dedican de manera ilícita se van a beneficiar”, sentenció.

Espinoza pidió a los diputados ayuda para abrirle el espacio a los expertos forenses y químicos del OIJ y que sus observaciones puedan incluirse en el reglamento que el Ejecutivo tiene que darle a la ley, que próximamente será presentado.

“Yo aquí no estoy diciendo que estoy de acuerdo o en desacuerdo con el cáñamo o que se legalice o no la marihuana, pero la ley a como está, es absolutamente inaplicable”, finalizó.