Gobierno desconvoca proyecto de renta global para salvarlo de inminente archivo
El Ejecutivo conoció que este miércoles una mayoría de diputados de la Comisión de Asuntos Hacendarios pretendía “matar” la iniciativa, que forma parte del acuerdo con el FMI.
El Gobierno anunció esta tarde la desconvocatoria de última hora del proyecto de renta global dual como una medida desesperada para intentar salvar la iniciativa del inminente archivo.
El Ejecutivo conoció que esta tarde un grupo mayoritario de diputados de la Comisión de Asuntos Hacendarios pretendía “matar” el proyecto de ley, uno de los ocho prometidos al Fondo Monetario Internacional en el marco del acuerdo de financiamiento ampliado por $1.778 millones.
“La desconvocatoria temporal se da ante la insistencia de algunos grupos políticos por matar el proyecto en comisión y sin concluir las audiencias en Hacendarios, el análisis por el fondo, tanto de las consultas recibidas y de las mociones presentadas. Además, estaremos enviando la retroalimentación técnica de las observaciones hechas por diferentes fracciones.
“Este proyecto de ley es un componente importante del acuerdo con el FMI, que busca dar estabilidad a nuestras finanzas y contribuir a la recuperación económica”, explicó la ministra de la Presidencia, Geaninna Dinarte.
El proyecto pretende, entre otras, reducir el límite exonerado del impuesto de renta a las personas que reciban ₡683 mil mensuales, tanto para asalariados como para trabajadores independientes, cuando hoy la base parte de ₡842 mil para los primeros y ₡312 mil en los segundos.
Además, defiende globalizar en un solo impuesto el pago que deben hacer las personas con más de un ingreso, ya que hoy ese pago se hace por separado.
Dinarte solicitó a los congresistas permitir que el proyecto pueda “enriquecerse con las observaciones y el trabajo técnico y que la comisión en su conjunto no impida que la iniciativa sea discutida en el Plenario Legislativo”.
El proyecto ha sido ampliamente cuestionado por diferentes actores que aseguran que podría golpear a todo el país y no solo a las personas de mayores ingresos, como defiende el Gobierno.
En ese sentido, la mayoría de diputados de la comisión lo han calificado como un impuesto nuevo y regresivo.
Este es un nuevo revés en la agenda de proyectos prometidos al FMI, que ya había enviado al archivo el proyecto de reducción de beneficios fiscales y que solo ha logrado votar la reforma al empleo público.
El otro expediente que ya superó la etapa de comisión es el de impuesto a las casas de lujo, que tampoco goza de mayor respaldo entre las bancadas.