20 de febrero de 2017, 4:58 AM

La sociedad presiona a las mujeres para que sean algo así como súper mamás y esto hace que en muchos casos aflore un sentimiento de culpa por trabajar fuera de la casa.

La presión viene de todos lados, de la familia, de los amigos e incluso de otras madres.

Cada vez que aflore el sentimiento, tome el tiempo para recordar por qué tomó esa decisión por una mejor calidad de vida por realización personal.

No permita que la presión afecte su estado de ánimo. Tome en cuenta estos consejos y disfrute de su maternidad y de su vida laboral.