Por Luanna Orjuela Murcia |14 de septiembre de 2022, 13:17 PM

Este miércoles, el alpinista costarricense, Warner Rojas, empieza las rotaciones que consisten en subir y bajar los campos altos de la montaña Manaslu. Este entrenamiento forma parte de su proceso de preparación para escalar la montaña del Everest, la más alta del mundo, el próximo año.

Manaslu se encuentra en Nepal y es la octava montaña más alta del mundo (8,163 metros de altura). Rojas la subirá sin oxígeno suplementario y sin sherpas, como parte de su preparación para escalar el Monte Everest en el 2023. 

Estas rotaciones tienen el propósito de condicionar al cuerpo para que el mismo pueda adaptarse a la altura y a las condiciones extremas a las que Rojas se enfrentará cuando suba el Everest. 

Sin embargo, antes de dar inicio a esta travesía con la mirada puesta sobre la meta que se plantea Rojas para el próximo año, él y su equipo (un grupo de alpinistas argentinos) hicieron una pausa antes de subir a los campos altos del Manaslu para realizar una ceremonia que tradicionalmente se celebra antes de emprender trayectos de este tipo. Se trata del ritual budista 'puja', del cual participaron estando en uno de los campamentos ubicados a 4.700 metros de altura.

Su nombre es de origen sánscrito y significa 'veneración devocional', además de ofrenda, ritual, triunfo o adoración. Su celebración se hace para eliminar las energías negativas y atraer las positivas, con el fin de que quienes realizan el ritual puedan atraer la armonía cuando emprendan recorridos de este tipo.

“Hemos realizado la puja, que es una ceremonia que se hace antes de subir a la montaña. Sin hacer esta ceremonia los sherpas no suben, nosotros no usamos sherpa, pero igual le pedimos permiso a la montaña para subir a los campos altos y que nos proteja el espíritu de la montaña”, comentó a Teletica.com el deportista costarricense.

Tal y como dicta la tradición, en el lugar donde se realiza el ritual, los alpinistas deben entregar todas las herramientas que utilizarán durante la travesía para que reciban una bendición durante la ceremonia.

"A la puja se lleva lo que más vamos a usar en la montaña: los piolets, arpones, las botas, y otras cosas que usaremos en la escalada. En el caso mío, la bandera de Costa Rica y una carta que me hizo mi hija para el Día del Padre. Sin esto no se sale a la montaña y es fundamental hacer la puja. Es una de las ceremonias que más me encanta que se hace en los Himalayas”, detalló Rojas.

Rojas y su grupo de alpinistas tardarán aproximadamente un mes y medio escalando este macizo, en una expedición cuyo recorrido podrá seguir en Teletica.com

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