Por Juan José Herrera |22 de septiembre de 2022, 15:07 PM

La junta directiva de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) decidió sepultar el cuestionado proyecto de “Terminal Pacífico”, que pretendía construir una terminal portuaria de combustibles en la costa de Puntarenas.

La iniciativa, impulsada por la administración anterior, tenía un costo original de $234 millones y pretendía garantizar el abastecimiento de gas licuado y gasolinas en el país al habilitar un nuevo punto de importación y así no depender solo de Moín.

Sin embargo, la Contraloría General de la República ya había advertido, en 2021, que el proyecto no contaba con elementos esenciales como, por ejemplo, una evaluación del costo-beneficio del proyecto ni ningún criterio de razonabilidad que respaldara esa millonaria inversión.

Hoy, en conferencia de prensa, el presidente de Recope, Juan Manuel Quesada, insistió en que el proyecto le costaría al país más de ₡200 mil millones “de forma irresponsable e injustificada”.

Dentro de sus justificaciones, la junta directiva actual insistió que el proyecto no era rentable desde el punto de vista financiero y que sus ineficiencias se hubieran tenido que trasladar a las tarifas de combustibles.

Además, añadió que los estudios financieros no permitían calcular el efecto tarifario y, además, sobrepasaba los límites de la regla fiscal.


“Se evidencia una desproporción entre el costo del proyecto y la demanda a satisfacer, siendo que el proyecto hubiese representado una tercera parte de los activos con que actualmente cuenta Recope, para satisfacer el 3% de la demanda total de combustibles”, cito el órgano en sus conclusiones.

“Tal y como fue nuestro compromiso en esta nueva administración, Recope no está dispuesto a apoyar inversiones donde no hay certeza de sus resultados, por eso decidimos traer abajo este proyecto. Para nosotros es inaceptable cargar a los costarricenses con ineficiencias que luego son trasladadas a las tarifas y que terminan pagándolo todos, tal y como ocurrió en el pasado.

“No vamos a permitir que se pague en tarifas las malas decisiones, porque nosotros sabemos que para los costarricenses cada colón cuenta. Nosotros tenemos claro que vinimos aquí a servirle a Costa Rica y, por eso, estamos actuando con total responsabilidad.”, dijo Quesada.