Por Juan José Herrera |5 de enero de 2021, 10:20 AM

Este martes fueron vacunados los primeros policías de Fuerza Pública contra el coronavirus.

Paul Morales Solano y Jonathan Gamboa Gómez, destacados en la delegación de Goicoechea en San José, fueron los dos primeros oficiales de los 14 mil que conforman todos los cuerpos policiales del país en recibir la dosis.

Ellos son parte del personal de primera respuesta contra la pandemia, por lo que tienen prioridad para recibir las primeras dosis de la vacuna de las poco más de tres millones compradas a Pfizer-BioNTech.

Según los criterios de riesgo establecidos por la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología, tanto el riesgo de enfermar gravemente y morir, como el riesgo de contagiarse y contagiar a otras personas, se establecieron los grupos a vacunar contra el COVID-19.

De esta forma, las personas adultas mayores que habitan en un centro de larga estancia, así como quienes laboran en estos sitios, y el personal sanitario, policial y de emergencia serán los primeros en recibir la vacuna.

El segundo grupo está compuesto por personas de 58 años o más, independientemente de si tienen o no algún factor de riesgo. Esta comprobación de edad se realizará por medio de la cédula nacional o de residencia.

El tercer grupo lo componen las personas entre 18 y 58 años que presenten algún factor de riesgo como: hipertensos, diabéticos, cardiópatas, enfermos respiratorios crónicos, enfermedad renal crónica, obesidad grado III y mórbida, pacientes con cáncer.

En el cuarto grupo estarán los funcionarios del Ministerio de Educación Pública, así como el sector educativo privado y el personal de los centros de atención integral (CAI) y de albergues del Patronato Nacional de la Infancia. De igual forma están incluidas las personas privadas de libertad y del Sistema de Emergencias 9-1-1.

El último grupo está compuesto por los estudiantes de ciencias de la salud y técnicos afines en campos clínicos de la CCSS, así como por la población de 40 a 57 años que no tenga otro de los riesgos previamente descritos, pero que realizan actividades laborales relacionadas a contacto con personas o de impacto en el sector productivo, como por ejemplo: agricultura, construcción, atención al cliente, restaurantes, empleadas domésticas, entre otros.