Posición oficial de Televisora de Costa Rica sobre la subasta de frecuencias de radio y televisión
Comunicado de prensa.
Ante los catastróficos efectos de la subasta de frecuencias de radio y televisión, ordenada por el Poder Ejecutivo, y ejecutada por la Superintendencia de Telecomunicaciones (SUTEL), Televisora de Costa Rica manifiesta a la opinión pública:
Nuestro país se encuentra ante un panorama gravísimo, que pone en peligro la supervivencia misma de la democracia. Lo habíamos advertido y hoy la amenaza se ha concretado. Con la excusa de “democratizar” el uso de las frecuencias, se ha asestado un golpe letal a la libertad de expresión, y decenas de empresas de radio y televisión, nacionales y regionales, han anunciado que deberán cerrar sus operaciones.
La democracia, como forma de organización política y social, es pluralista. En ella debe haber cabida para todas las formas de pensamiento, para las distintas corrientes culturales, para partidos políticos de izquierda o de derecha, para los libre pensadores y los conservadores, para los críticos del gobierno de turno y para sus seguidores. Ese pluralismo debe estar representado por la más amplia gama de medios de comunicación, gracias a los cuales recibimos y transmitimos ideas e informaciones de toda índole.
Sin embargo, hoy nos encontramos ante un escenario inverso, donde tendremos menos pluralismo informativo y, por tanto, menos democracia. El proceso de subasta realizado por la SUTEL, con criterios meramente económicos y recaudatorios, es contrario a la jurisprudencia de derechos humanos en la materia y expone al país a una condena por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
También, nos recuerda lo sucedido en Venezuela, donde el deterioro democrático se produjo en un contexto de cierre de medios de comunicación. El autoritarismo requiere callar voces; la democracia demanda su pluralidad.
Televisora de Costa Rica está participando en el proceso licitatorio, donde intentamos que se corrigiera el cartel por los graves efectos que produciría y que ahora constatamos. Sin embargo, la SUTEL y la Contraloría General de la República rechazaron las objeciones de todos los oferentes. Son las reglas de juego fijadas, a las cuales debemos someternos para continuar operando.
Sin embargo, denunciamos con firmeza este atropello a la libertad de expresión y a nuestra democracia, y reiteramos nuestro firme compromiso con los hechos y la verdad.


