Por Juan José Herrera |19 de agosto de 2020, 8:40 AM

Los efectos de la pandemia del COVID-19 aumentan también el pesimismo entre los costarricenses.

De la mano con la caída en el respaldo a la gestión de Carlos Alvarado y su Gobierno, las opiniones negativas sobre el rumbo del país crecieron.

Si bien desde enero 2018 el pesimismo en torno a este punto se ha mantenido alrededor del 60%, la crisis sanitaria y económica sí ha disparado la desesperanza en torno a la situación del país.

Hoy un 82% de las personas califican la situación económica como mala o muy mala, en comparación con el 67% que se registró en el estudio de abril anterior.

Esto también se ha visto reflejado en la institucionalidad del país, con una caída en la confianza de los ticos, especialmente hacia la política.

Así, los partidos políticos (3,8), sindicatos (5), Asamblea Legislativa (5) y el Gobierno en general (5,1) son las entidades en las que ahora menos creen los costarricenses.

En el otro extremo, la Universidad de Costa Rica (8,6), el Ministerio de Salud (8,2) y la Caja Costarricense de Seguro Social (8,1) se mantienen a la cabeza del apoyo de la población en sus labores.