Por José Fernando Araya |18 de noviembre de 2020, 9:46 AM

Las personas que padecen enfermedades crónicas no transmisibles, llámese hipertensión, diabetes, obesidad y trastornos en el sistema inmunológico, entre otras, son la principal preocupación de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en época de pandemia.

Todos ellos tienen un factor de riesgo que provoca más hospitalizaciones e incluso muertes, debido al virus que provoca el COVID-19.

De ahí que la Caja anunció, este miércoles, que esta población volverá a contar con la atención habitual de consulta externa, según Román Macaya, presidente ejecutivo de la institución.

La idea es reforzar y tener bajo la lupa a este perfil de pacientes, pese a que la mayoría tuvo vigilancia vía telefónica, consulta presencial y otros medios alternativos.

“El foco se dirige a intensificar el cuidado de la salud de las personas con enfermedades crónicas no transmisibles con el fin de proteger a esta población ante el riesgo de COVID-19, por cuanto mejor tenga compensado su padecimiento más posibilidad tiene de evolucionar de manera favorable frente a este coronavirus”, explicó Macaya.

Por su parte, el doctor Mario Ruiz Cubillo, gerente Médico de la CCSS, informó que se emitieron dos directrices con el objetivo de brindar la atención más eficiente a esta población.

La primera es un lineamiento técnico del proceso de atención a la persona con enfermedad crónica en los servicios de consulta externa de los tres niveles de atención de la CCSS; la otra es la actualización del lineamiento técnico-operativo y administrativo temporal en servicios de consulta externa.

Según Ruiz, estas enfermedades suelen potenciarse todavía más en amenaza con el COVID-19.

“Esto no representa la reapertura total de estos servicios, si no que vamos a monitorear, vigilar y brindar atención eficiente y más oportuna a la población más sensible para evitar esta sinergia entre el COVID-19 y otras enfermedades”, explicó Ruiz.

El gerente detalló que cada establecimiento de salud asegurará las condiciones en cumplimiento de los  de protocolos de salud para garantizar la atención tanto al paciente como al personal de salud: equipo de protección personal, atención diferenciada, flujos de usuarios y personal, distanciamiento, uso de mascarilla, lavado de manos, etiqueta de tosido y estornudo, entre otras medidas.

Por su parte, el director de Redes Integradas de Prestación de Servicios de Salud de la Caja, doctor Eduardo Cambronero, indicó que los lineamientos definen para el primer nivel el cuido básico y seguimiento intenso de los pacientes, en tanto el segundo y tercer nivel, actúan como apoyo especializado mediante la organización de red de los servicios CCSS.

Además, destacó que el lineamiento de atención de crónicos (diabetes, hipertensión, asma, enfermedad pulmonar crónica, dislipidemia, etc.) está centrado en las personas con criterios de vulnerabilidad y riesgo e incluye condiciones como edad, etnia, accesibilidad a los servicios. 

La situación de los pacientes crónicos es muy grave, pues según datos revelados por la Caja, de cada 100 personas mayores de 20 años, 15 son diabéticas y 37 son hipertensas, además, la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en Costa Rica.

Más del 50% de las personas que se han internado por COVID-19 padecen de presión alta, mientras que el 40% de diabetes.