Caso Altamar: Investigación revela que líder participaba como pastor evangélico en Golfito
Según el OIJ, este hombre, de nacionalidad colombiana, utilizaba esa investidura para justificar los movimientos de dinero.
El líder del aparente grupo dedicado al tráfico internacional de drogas en Costa Rica participaba como pastor evangélico en una iglesia de Golfito.
Así lo determinaron las autoridades del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) como parte de la Operación Altamar.
Se trata de un hombre de 38 años, de nacionalidad colombiana, pero nacionalizado tico, de apellidos Cortés Franco, y quien ya había cumplido sentencia por narcotráfico en nuestro país.
“Este sujeto hace algunos años fue detenido en una embaración ingresando droga al país, por eso se le abrió un proceso, se le juzgó y posteriormente se asentó en el país. Ahora está en trámite de su residencia y está casado (…) Es miembro de una iglesia evangélica en Golfito y aparentemente tiene una posición de liderazgo como de pastorado, no el principal, pero sí de liderazgo. Él utilizaba también esa investidura para justificar el movimiento de dinero”, explicó Michael Soto, director del cuerpo policial.
Cortés es pareja de una mujer de apellidos Beita Chacón, de 60 años, quien también se encuentra siendo investigada y detenida como sospechosa de colaborar con la estructura.
Según las autoridades, desde hace varios años la femenina es conocida por la policía debido a que estuvo ligada con el caso de un tico detenido en Colombia con droga y que ahora cumple condena en Estados Unidos.
“Ella se dedicaba al movimiento de capitales y como asesora porque ya tiene bastante experiencia en el tema”, añadió Soto.
Ambas personas ya fueron detenidas por los agentes judiciales.
Además, las autoridades buscan a un oficial del Servicio Nacional de Guardacostas identificado con los apellidos Umaña Gómez, quien podría haber filtrado información al grupo delictivo.
Las 18 diligencias se llevan a cabo desde la madrugada de este martes, principalmente en Golfito con 10 allanamientos, uno en Corredores, tres en Heredia, uno en Puntarenas, dos en Quepos y uno en Alajuela.
El grupo estaría conformado por 14 personas colombianas y costarricenses, 12 de ellas ya ubicadas.
