Por Juan José Herrera |14 de septiembre de 2021, 18:36 PM

Las autoridades del Sistema de Áreas de Conservación de Costa Rica (SINAC) aún no determinan el impacto ambiental que provocó y provoca el yate que se hundió el pasado 31 de agosto en la costa pacífica, a la altura de Cabo Blanco, Puntarenas.

La embarcación, que transportaba a dos personas, encalló luego de chocar contra la isla de Cabo Blanco, hundiéndose poco después.

Uno de los tripulantes precisó que el mal tiempo provocó que encallaran y tuvieran que ser rescatados por el Servicio Nacional de Guardacostas.

Sin embargo, poco después las corrientes marinas llevaron los restos de la embarcación hasta la costa, provocando un amplio despliegue de las autoridades para atender la situación.

“Tenemos ya 13 días trabajando en la extracción de escombros. Lo primero que hicimos lógicamente fue tratar de sacar el combustible y otros materiales contaminante. Logramos extraer tres estañones de una mezcla de diésel con agua marina, lo que nos hace pensar que sí hubo un derrame.

“También utilizamos colchonetas para absorber el aceite que había en la zona y ahora estamos con maquinaria y voluntarias para tratar de sacar el resto, una mezcla de madera, cables, fibra de vidrio y todos los demás restos de la embarcación”, explicó Nelson Marín, director del Área Conservación Tempisque.

Marín precisó que la Reserva Absoluta de Cabo Blanco está tan bien protegida que su acceso es complicado pero que también el daño es más considerable.

“Tenemos por delante una evaluación y monitoreo del impacto ambiental, pero a nivel visual los daños son evidentes, ver todos esos restos por supuesto que afecta y sabemos que el daño ambiental está ahí, lo que no sabemos es su gravedad”, añadió.

El funcionario aseguró que algunas personas afirman que esa embarcación traía 5 mil litros de combustible, por lo que hay una preocupación real sobre si el derrame es peor de lo pensado.

Las labores de limpieza fueron detenidas esta semana para hacer una pausa con el objetivo de que las personas involucradas descansen, pero además debido al mal tiempo en el lugar.

Los trabajos se reanudarían el próximo 20 de setiembre.

Marín aseguró que, hasta ahora, se calcula que las autoridades han destinado alrededor de ₡5 millones para las labores de limpieza y sin contar la ayuda que empresarios de la zona han donado en tiempo de maquinaria y mano de obra.

“Mucha gente ha ayudado pero esa ayuda tiene un límite, por eso necesitamos más. Calculamos que se van a necesitar unos $20 mil para terminar las labores de limpieza y realizar ese estudio de impacto ambiental, que son recursos que no tenemos y que no hay certeza de a quién le corresponde pagar”, finalizó.

El SINAC comunicó que si las personas quieren donar dinero para contratar maquinaria puede hacerlo a través de la fundación Fundecodes mediante la cuenta del Banco Nacional: 100-01-083-000913-5, Cuenta Cliente: 15108310010009139; Cuenta IBAN: CR26015108310010009139.

También puede ayudar a través de la cuenta de la Asociación de Desarrollo de Santa Teresa y Mal País, ADI para la administración y asignación de los recursos http://paypal.me/adimalpaisantateresa