Por José Fernando Araya |28 de septiembre de 2020, 12:11 PM

La tempestad vino en la fecha 2. Alajuelense perdía en el Morera Soto ante Guadalupe en el retorno de Bryan Ruiz y de inmediato se vinieron las críticas y la afición rojinegra dictaminó su juicio: la cabeza de Andrés Carevic.

Algunos incluso contaban las horas para que el estratega se marchará de Liga Deportiva Alajuelense, incluso una polémica foto de Agustín Lleida hablando con Alexandre Guimaraes atizó las redes sociales e incluso muchos le dieron la bienvenida a Guima al equipo.

La situación del argentino llegó a ser prácticamente insostenible para la directiva cada día más presionada por una afición que aún se lamenta de la pérdida de dos títulos seguidos.

Pero luego de la tempestad, vino la calma y la calma le trajo seis victorias consecutivas.

Seguidilla.

A partir de aquel jalón de orejas los manudos no volvieron a perder ni un punto en una vuelta completa.

Tras las presiones, la Liga fue a visitar al Herediano en el Cuty Monge y lo derrotó 2-1 mostrando otra cara.

Luego despachó al Santos en casa 1-2 y tuvo dos salidas complicadas consecutivas, una ante Grecia en la que terminó ganando 2-3 con un polémico arbitraje y otra ganando con contundencia 0-4 al Santos en Guápiles.

Terminó de reafirmar su recuperación ante Grecia en casa (3-1) y este fin de semana ante el Herediano (2-0) en un partido que fueron amos y señores del partido desde el arranque.

“Todavía falta torneo, falta mucho. Vamos bien en el campeonato y el primer objetivo es clasificar. No hemos ganado nada”, sentenció el estratega una vez finalizado el encuentro ante el Team.

A punta de victorias, el estratega argentino disipó todas las dudas y hoy goza con tranquilidad, esto le dará más colchón por ahora, pero sabe que la idea de volver a figurar durante todo el torneo y no terminar con el título no sirve para nada y este es su principal reto de la temporada: quedar como el estratega que guío a la Liga a la ansiada 30 o el que ha perdido tres títulos consecutivos.