Por Teletica.com Redacción |18 de agosto de 2016, 7:03 AM

Una medalla olímpica provoca lágrimas, emociones encontradas, alegrías, abrazos y hasta gritos… En fin cualquier tipo de reacción, casi siempre asociada con alegría.

Sin embargo, para el atleta norcoreano Ri Se-gwang adueñarse de una presea dorada no generó mucha reacción que digamos.

Se-gwang ganó el oro en la modalidad de saltos de la gimnasia de Río 2016 y durante la entrega de medallas apenas sonrió y mantuvo su mano en la sien derecha mientras sonaba el himno nacional e izaba la bandera de Corea del Norte.

Se trata de que las redes y los medios han bautizado como el “medallista más triste de Río”. Otros incluso van más allá y aseguran que se trata del más triste en la historia de las justas.

Pero el diario británico 'Mirror' sugiere que el atleta de hecho “era más emocional tras haber probado el mundo libre” y aseguran que "sabe que pronto volverá a la empobrecida Corea del Norte” y “cambiará el espléndido alojamiento de los atletas en Río de Janeiro por el entorno sombrío de Pionyang”.

Sin embargo, en declaraciones brindadas al 'Daily Mail', el atleta asegura estar “lleno de alegría al poder llevar una victoria a nuestro líder”, en referencia al dictador norcoreano Kim Jong-un.