Internacional

Un civil y un militar muertos en un tiroteo en una base naval de EE.UU.

Un civil pasó el control de seguridad y abordó el destructor Maham, en la base naval de Norfolk (Virginia, EE.UU.)...

25 de marzo de 2014, 4:41 AM

Un civil pasó el control de seguridad y abordó el destructor Maham, en la base naval de Norfolk (Virginia, EE.UU.), la mayor del mundo, donde hirió fatalmente a un marino y luego murió al enfrentarse con el personal de seguridad, según confirmaron hoy fuentes del Departamento de Defensa de EE.UU.

El incidente ocurrió poco antes de la medianoche pasada en el Muelle 2, indicó la portavoz de la Marina de Guerra, Terri Davis, quien dijo que no había información sobre otros heridos.
Tampoco se divulgaron por ahora las identidades de los dos hombres muertos.

Según los militares, el civil tenía algún tipo de identificación que le permitió ingresar en la base, pero subió al barco sin la autorización debida.

Un informante, citado por la cadena CNN, dijo que el individuo arrebató la pistola de un suboficial que estaba de guardia. Otros dos marinos de guardia llegaron al sitio y el civil hirió fatalmente a uno de ellos.

Jim Moir, otro portavoz de la Marina, indicó que el personal de vigilancia en el barco mató al sospechoso.

El almirante Bill Gortney, jefe del Mando de Flotas en Norfolk, inició esta mañana una conferencia con un minuto de silencio en honor del marino muerto y agregó: "Averiguaremos qué ocurrió e impediremos que vuelva a ocurrir".

Las actividades en la base quedaron paralizadas por unos 45 minutos después del tiroteo, y aunque oficiales, suboficiales y tropa se presentaron hoy a sus labores en el Mahan, se ordenó al resto del personal que no concurriera a la nave.

Hace una semana el Pentágono publicó una serie de recomendaciones para mejorar la vigilancia en las bases militares como resultado del incidente del año pasado cuando un contratista civil, Aaron Alexis, mató a doce personas y se suicidó en el Astillero naval de Washington.

El Mahan, un destructor de la clase Alreigh Burke, retornó a Norfolk en septiembre después de una misión de ocho meses que incluyó el desplazamiento en el Mar Mediterráneo por la crisis en Siria.

La nave, comisionada en 1998, tiene una tripulación de más de 250 marinos y oficiales.