8 de junio de 2018, 10:01 AM

La advertencia de los grupos opositores a Daniel Ortega fue clara: si los empresarios centroamericanos siguen enviando a Nicaragua camiones pesados con mercancía, ya sea porque se quedan allí o están de paso, los quemarán.

Un video enviado a Teletica.com por la Cámara Nacional de Transportistas de Carga (Canatrac) da cuenta de la negativa de los adversos al gobierno de Ortega para que las unidades prosigan su camino.

Más bien amenazan con quemar los camiones si estos deciden moverse o, bien, si las empresas ubicadas fuera de Nicaragua siguen enviado unidades.

En el video -que fue grabado en algún punto que no fue identificado- se observa cuando uno de los opositores asegura que el bloqueo a la circulación de vehículos pesados, se extenderá por al menos 48 horas.

Francisco Quirós, director ejecutivo de Canatrac, se mostró preocupado porque hay, al menos, unos 100 costarricenses atrapados en dichos bloqueos en el vecino país.

Se estima que hay unas 4.000 unidades de toda Centroamérica en dicha condición en diferentes puntos nicaragüenses.

"Hay compañeros a los que se les están acabando las provisiones y hasta tenemos algunos con enfermedades crónicas que necesitan atención. Ya se trata de algo humanitario", comentó Quirós.

Por su parte, Francisco Gamboa, director ejecutivo de la Cámara de Industrias de Costa Rica, también respaldó la preocupación de Canatrac, en vista -dijo- de que existe el riesgo de que el sector pierda por día unos 2.500 millones de colones.

Esta tarde la canciller de la República, Epsy Campbell, aseguró que desde Costa Rica es poco lo que pueden hacer por los transportistas varados en el país del norte.

"Lo que está sucediendo en Nicaragua es resorte de Nicaragua y no tenemos la posibilidad de que una situación que vive ese país pueda ser solucionada desde nuestro gobierno", aseguró.

Hasta el momento la crisis en Nicaragua ha dejado un saldo de 134 muertos, cientos y cientos de heridos y saqueos y choques entre fuerzas del orden y grupos "paramilitares" afectos a Ortega y grupos de la sociedad civil.