Por AFP Agencia |5 de agosto de 2016, 2:07 AM

El presidente de la FIFA desde febrero, Gianni Infantino, quien se vio envuelto en una serie de acusaciones de conflicto de intereses, salió airoso este viernes al ser absuelto por la Comisión de Ética del máximo regidor del fútbol mundial, cerrando así la investigación al respecto.

La inquietud ha desaparecido rápidamente: Infantino no será suspendido como su predecesor Joseph Blatter, quien cumple una pena de seis años fuera de toda actividad relacionada con el fútbol por "abuso de su posición", "conflicto de intereses" y "gestión desleal".

"Tras las investigaciones preliminares y formales, la cámara de investigación de la Comisión de Ética independiente decidió terminar sus investigaciones sobre el presidente de la FIFA, Gianni Infantino," anunció la FIFA en un comunicado.

La Comisión de Ética, que había desmentido la apertura de una investigación, explicó que lo ha hecho "para asegurarse un proceso independiente e imparcial."

A principios de junio, los medios de comunicación alemanes aseguraron que Infantino había considerado que el salario propuesto por la FIFA era insuficiente y que estaba siendo investigado por la Comisión de Ética por haber pedido la destrucción de una grabación en la que se refería a la cuestión de su sueldo, por lo que estaba expuesto a una suspensión de 90 días.

Al comienzo de su reinado también se vio salpicado por la dimisión de Domenico Scala, presidente de la Comisión de Auditoría de la FIFA. Scala protestaba también contra una enmienda votada que daba poder al gobierno de la FIFA a la hora de nombrar o despedir a los presidentes de las comisiones de ética o auditoría. "Eso priva a estos órganos de cualquier independencia" y "destruye uno de los logros esenciales de la reforma", denunció Scala en un comunicado de prensa.

'Progresos tangibles'

La Comisión de Ética explicó este viernes que las pruebas recopiladas "sugieren a primera vista casos de violación del código de ética por varios vuelos efectuados por Infantino durante sus primeros meses de presidencia", cuestiones de recursos humanos y "rechazo de Infantino de firmar el contrato especificando las condiciones de su relación de trabajo con la FIFA."

Sin embargo, durante la investigación formal, "ninguna situación significativa de conflicto de intereses respecto a la posición de Infantino en la FIFA ha sido identificada", prosiguió el comunicado.

"Las ventajas de las que beneficia Infantino no están consideradas como no conformes" a la regulación de la FIFA en vigor, precisó la nota.

Un cuarto de hora después de que se diera a conocer el comunicado de prensa para anunciar esta decisión, Infantino se declaró "satisfecho" y deseó "agradecer a todos los que han cooperado con la comisión de ética por asegurar que los hechos sean escuchados y la verdad triunfe."

"El presidente y la administración de la FIFA continuarán concentrándose en el desarrollo del fútbol como sus esfuerzos de mejorar la organización", aseguró Infantino.

"Se han producido progresos tangibles en áreas clave como (...) mejorar la gobernanza de la FIFA, reparar la reputación y restablecer la confianza con sus grupos de interés", agregó el presidente de la institución.

Elegido al frente de la FIFA el 26 de febrero para acabar con una crisis sin precedentes, Infantino no ha logrado disipar los fantasmas de la era Blatter.

Un día antes de este anuncio, Infantino fue fotografiado en Rio de Janeiro en la sede de la Confederación brasileña de fútbol (CBF) sonriendo al lado de su presidente, Marco Polo del Nero, acusado por la justicia estadounidense por presunta corrupción e investigado por el Comité de Ética de la FIFA.