Internacional
Cristiano Ronaldo pasó desapercibido casi una hora en el centro de Madrid
El portugués, incluso, jugó con el balón, le pidió sin éxito un número de teléfono a una mujer y hasta se comió una manzana, en la tranquila plaza Callao de la capital española.
Cristiano Ronaldo pasó casi una hora en el centro de Madrid sin que nadie lo reconociera. Lejos de las cámaras y los autógrafos.
El portugués, incluso, jugó con el balón, le pidió sin éxito un número de teléfono a una mujer y hasta se comió una manzana, en la tranquila plaza Callao de la capital española.
Todo esto fue posible gracias a un estupendo disfraz que convirtió al tres veces Balón de Oro en una persona común. Al final, Ronaldo se quitó su máscara, le firmó un esférico a un niño y se marchó en medio de una multitud.