Por Teletica.com Redacción 5 de octubre de 2016, 10:25 AM

Su amor por el fisicoculturismo y por los músculos llevó a un brasileño de 48 años a inyectarse aceite en sus brazos.

Valdir Segato se siente orgulloso cuando lo llaman en la calle Hulk, He Man o Schwarzenegger, personajes que admira por su musculatura.

Su objetivo es claro: acercarse al récord mundial del egipcio Moustafa Ismail, quien tiene unos bíceps de 78 centímetros, 20 más que el brasileño.

Para lograrlo se inyecto Synthol, una sustancia que permite el agrandamiento muscular pero que podría dañar permanentemente su cuerpo y que señalan médicos, podría hacerlo perder una de sus extremidades o incluso la vida.

Pero esto le importa poco Segato quien asegura que su cuerpo se convirtió en su escape luego de que durante su juventud sufriera problemas de drogadicción y viviera en las calles.