Carlos Soto: El tico que Forbes destacó en su lista ’30 under 30’

Aparecer en una lista de Forbes no es un hito que muchos puedan presumir. Para Carlos Manuel Soto, costarricense de 29 años, esta distinción es un punto y aparte para su trayectoria profesional.

Soto figura en la lista de la reconocida revista especializada en negocios y finanzas, Forbes, la cual recientemente publicó su lista ’30 under 30’, dedicada a resaltar a jóvenes menores de 30 años que destacan por su liderazgo y por sus logros en el sector del emprendimiento.

En la lista figuran otros nombres conocidos, como Hailey Bieber (destacada en la categoría de las artes), Rauw Alejandro y Becky G (en la categoría de música). “En la lista aparecen desde celebridades como Hailey Bieber hasta personas como yo, que somos totalmente desconocidos”, reconoce Soto.

Con su carisma, al cual atribuye una parte de su éxito, este joven costarricense reconoce que llegar hasta donde está ahora no fue un proceso fácil. Se mudó a los Estados Unidos hace 10 años para cursar sus estudios universitarios en la universidad Loyola Marymount de Los Ángeles donde, en una clase, le asignaron desarrollar su propio modelo de negocios.

Así fue como nació la semilla de Nosotros Tequila hace siete años, la empresa que hoy encabeza con su socio, Michael Arbanas, y que distribuye sus productos en 10 estados, incluyendo California, y en cuatro países: Costa Rica, Honduras, México y Estados Unidos.

Aunque el proyecto nació en 2015, no fue hasta 2017 que estos jóvenes emprendedores consiguieron vender su primera botella. Este hito fue posible, según señala Soto, gracias a un préstamo que le concedió uno de los principales bancos norteamericanos, Bank of America.

“Lo que comenzó como un proyecto universitario del nativo e inmigrante costarricense Carlos Soto ahora se ha convertido en la compañía de tequila mezcal autodistribuida más grande de California”, destaca Forbes en la publicación sobre Soto.

No fue hasta finales de 2020 que Soto y Arbanas lograron incorporar sus productos en los mercados costarricenses, donde hoy se pueden adquirir en restaurantes con productos ‘boutique’, en el Automercado, en los ‘Duty Free’ de los aeropuertos y en los locales de algunas licoreras independientes que operan en las zonas costeras del país, como Guanacaste y Puntarenas.

“El recibimiento que ha tenido la marca, una que a fin de cuentas la compone una planilla donde el 20% son costarricenses, ha comprobado que la marca logró sembrar una fuerte conexión con nuestro país”, señala Soto.

Aunque hoy celebra este triunfo, también lamenta el hecho de que, de haber iniciado su empresa en nuestro país, quizás no hubiera tenido el mismo éxito que hoy presume.

“Algo que EEUU hace muy bien es que le da mucho apoyo a las PYMES”, defiende Soto. Detalla que las ventajas que ofrece ese país se evidencian en “cosas tan simples como la forma en la que se hace la contabilidad”.

“En EEUU tenemos la oportunidad de hacer cash accounting, o contabilidad de efectivo, donde podés registrar todos tus gastos a final de año. Por otro lado, en Costa Rica no se ofrece esa opción, se tiene que facturar el total del costo de los productos que vendemos y algo tan sencillo como eso nos da una flexibilidad enorme de poder tener un poquito más de gastos de entrada”.

Otro reto que aleja las operaciones de Nosotros Tequila de su país natal tiene que ver con la naturaleza de la industria en la que opera: “A mí me encantaría poder destilar en algún momento en Costa Rica, pero tenemos un monopolio como la FANAL que es la única autorizada para hacerlo en el país y hasta que eso no se levante, esta industria no podrá crecer”, apunta. 

Esto es algo que inquieta especialmente al joven emprendedor, quien señala que “se debe tomar en cuenta que Centroamérica es el lugar por excelencia para la producción de alcoholes como el ron, y vemos que otros países de la región han identificado esa oportunidad y han permitido la operación de empresas privadas, algo que ha resultado muy beneficioso económicamente. Sin embargo, en Costa Rica, con este monopolio tan robusto, no contamos con esa opción”.

En tercer lugar, Soto subraya la legislación laboral de Costa Rica como otro de los obstáculos que pueden frenar a un emprendimiento que busca establecerse. 

Explica que, cuando inició su empresa y todavía no contaba con mucho capital, la única opción que tenía era contratar a empleados a medio tiempo. “Eso es algo que, con respecto a cargas sociales, en Costa Rica sería imposible, porque por el simple hecho de tener a alguien en planilla se tendrían que asumir cargas sociales muy pesadas, independientemente si se trabaja a medio tiempo o a tiempo completo”, indica. 

Soto argumenta que, pese a que parezca ser algo sin importancia, este tipo de beneficios “tienen mucho peso cuando estás empezando un negocio, cuando cada colón que gastás te pesa y hay momentos donde estás a días de quedarte sin fondos”.

Aunque confiesa que su meta siempre será poder volver de alguna forma a su país natal, ahora que opera en Estados Unidos se ha asegurado de que su marca lleve algún guiño a sus raíces costarricenses. 

Por eso es que, en el logo que aparece en la parte frontal de sus botellas, aparece un tucán, uno de los animales más emblemáticos de Costa Rica. Eso sí, “si te fijás en el ala del tucán, notarás que tiene la forma del estado de California, que es donde opera la compañía”.

Soto también se ha propuesto utilizar su empresa como herramienta para el impacto social en Costa Rica. Por eso fue que decidió convertir a Nosotros Tequila en el patrocinador de la surfista Brisa Hennessy. 

“Podemos hacerlo porque somos una compañía que está fuera de Costa Rica y ella compite afuera del país. Sin embargo, me parece ridículo que los licores no puedan participar ni ayudar a potenciar las actividades deportivas del país por una regulación bastante tonta sobre algo que es bastante común en otros países”.

Consultado sobre cuáles consejos le daría a emprendedores como él que buscan abrirse en un espacio en el mercado, Soto responde con tres consejos: “el primero es echarse al agua, el segundo es tener muy claro cuál es la propuesta que uno está llevando porque servirá a la hora de vender y de defender su producto. Por último, aconsejaría potenciar la habilidad de conectar con otras personas porque, al final, hacer negocios consiste precisamente en saber cómo conectar con las personas”.