Perfeccionista y generoso: así recuerdan trabajadores de Teletica a Nelson Hoffmann
El productor de ‘Sábado Feliz’ murió el pasado jueves por causas naturales.
La muerte de Nelson Hoffmann Cochot, uno de los rostros más emblemáticos de la televisión costarricense, dejó un vacío profundo en las instalaciones de Teletica.
Compañeros de trabajo y miembros del equipo técnico compartieron recuerdos cargados de admiración y cariño hacia el productor de Sábado Feliz, quien falleció a los 74 años por causas naturales.
Más allá de su innegable legado en pantalla, muchos coinciden en que su personalidad reservada, su alto estándar profesional y un pequeño gran gesto —los chocolates que regalaba en cada jornada— marcaron su estilo de liderazgo y cercanía.
“De don Nelson siempre voy a admirar la manera de trabajar, demasiado reservado, pero hacía que todo fuera exitoso, entonces eso llamaba mucho la atención y me encantaba”, comentó la maquillista Katherine Abarca.
“Y siempre voy a recordar los chocolates que repartía. Hoy, por cierto, su asistente Crissi nos dio a todos chocolates, y fue muy emotivo, hubo lágrimas. Muy bonito, la verdad”.
Ese gesto también fue recordado por Manfred Fonseca, camarógrafo del canal.
“Don Nelson era muy exigente, pero cuando hacías bien tu trabajo, en el corte comercial sacaba y te daba un chocolate. Eso significaba ‘buen trabajo’”, indicó.
El asistente de sonido, David Vargas, se unió a las palabras de gratitud.
“Nelson era un gran ser humano, una institución en la televisión. Siempre se preocupaba por su programa, pero sobre todo por nosotros. Al principio del día llegaba, nos saludaba y nos traía chocolates. Si todo salía como a él le gustaba, nos felicitaba. Siempre va a ser esa persona especial”, ratificó.
Randall Solano, también asistente de sonido, recordó con humor y admiración su carácter exigente.
“Muchas veces llegaba y me regañaba, y se daba media vuelta muerto de risa, como diciendo ‘se la creyó’. Era sumamente perfeccionista, todo tenía que salir con excelencia. Nos exigía al máximo para que el programa saliera perfecto”, terminó.
La figura de Hoffmann, quien dirigió durante décadas espacios como Hola Juventud y Sábado Feliz, sigue viva en los recuerdos de quienes compartieron con él detrás de cámaras. Aun en sus últimos años, nunca consideró el retiro, y se mantuvo activo y comprometido con la televisión hasta el final.
Hoy, en los pasillos de Teletica, su ausencia se siente, pero también se honra con anécdotas, risas, lágrimas… y chocolates.
