Internacional

¿Qué sucederá cuando fallezcan los últimos testigos del nazismo?

Pronto, los últimos supervivientes del Holocausto no podrán contar más sus historias. Pero hay mucha gente recopilando sus experiencias para que no desparezcan de la memoria.

28 de enero de 2019, 18:00 PM

Su silencio duró 59 años. 59 años sin decir una palabra sobre el humo que vio salir de los crematorios. 59 años sin decir una palabra sobre el hacinamiento, la sed y los gritos que tuvo que soportar durante semanas. 59 años sin decir una palabra sobre Auschwitz.

Éva Fahidi regresó el 1 julio de 2003. Decidió enfrentarse a todo una vez más. Desde entonces, no puede parar de hablar, sobre todo, porque quiere que ese infierno en la Tierra no caiga en el olvido.

Dos vidas: antes y después de Auschwitz
La Gendarmería húngara detuvo, por encargo de los nazis, a Éva Fahidi y a su familia en abril de 1944. Fueron deportados al campo de concentración Auschwitz-Birkenau. Su madre y su hermana fallecieron en una cámara de gas; su padre en el campo de exterminio. Ella tuvo que realizar trabajos forzados. En 1945 logró escapar de una marcha de la muerte.

En la actualidad, Fahidi explica que tiene dos vidas. Una antes y otra después de Auschwitz. El Memorial a la Resistencia Alemana le dedicó una exposición y por ese motivo viajó desde Budapest a Berlín.

"Tenemos que vivir confiando en que no volverá a suceder otra vez“

Éva Fahidi tiene 93 años y es una de las últimos supervivientes del Holocausto. ¿Qué pasará cuando ella y los otros que todavía se acuerdan de lo sucedido ya no vivan? Fahidi cree que “tenemos que vivir confiando en que no volverá a suceder otra vez“. “Además, están los libros y los documentos. Algo tiene que quedar sea como sea”, añade Fahidi.

En Berlín, Fahidi habló sobre su regreso a Auschwitz, justo 59 años después de que ella y su familia fueran deportadas allí. Desde entonces, visita el lugar con regularidad.
Leszek Szuster, director del Centro Internacional de Encuentros para Jóvenes en Auschwitz, explica que "en los 33 años de nuestra existencia, estuvimos en estrecho contacto con 50 sobrevivientes de Auschwitz”. Ahora solo vienen cuatro o cinco para hablar con grupos sobre sus experiencias. Muchos han fallecido.

Szuster es consciente de que el tiempo vuela. Por eso, habla con regularidad con los supervivientes para poder dar a conocer tantas historias personales y declaraciones como sea posible: “Cada día hablo por teléfono con Zofia Posmysz a las 11 de la noche, y nuestras conversaciones duran una eternidad”, aclara.

Esa es la razón por la que están grabando los encuentros de los sobrevivientes con la gente joven: para cuando ya no estén en este mundo. Szuster quiere hablar sobre Auschwitz y la historia, para advertirles sobre peligros, como el antisemitismo, el populismo o el odio hacia los refugiados. Para él, las conversaciones entre los supervivientes y los jóvenes son lo más importante de las visitas y no el recorrido por el campo de exterminio.

“Cartas contra el olvido”

En Renania del Norte Westfalia, un grupo de jóvenes voluntarios se ha propuesto ayudar a esos últimos testigos del nazismo que ya no pueden pesentarse en escuelas, porque están muy débiles y muy mayores. Son los encargados de que las experiencias no se las lleve la muerte. Las exponen a alumnos en colegios. Luego, los alumnos escriben “cartas contra el olvido” a los testigos del horror nazi.

Querida Erna:
Me parece increíble que hayas podido sobrevivir. Llegaste con 15 a un campo de concentración, Auschwitz. Casi te moriste por una enfermedad y, a pesar de todo, sobreviviste (increíble). Me da pena que alguien te haya robado tu pan en tu 20 cumpleaños.

Muchos saludos
Meiko (11 años)

"Estoy abierto a experimentar"

Leszek Szuster piensa que el recuerdo del Holocausto no debe convertirse en una Disneylandia. Pero “cuando los hechos son correctos y la historia de los supervivientes se cuenta de forma auténtica, entonces estoy abierto a experimentar”, subraya.
Sin embargo, ciertos eventos culturales le parecen controvertidos. Así le parece el caso del artista conceptual polaco Zbigniew Libera, quien hace unos años construyó el campo de concentración de Auschwitz con piezas de lego. “Un lugar de exterminio como juguete puede conducir a malentendidos, independientemente de las intenciones del artista”.

De vuelta a Berlín. Éva Fahidi cuenta, sobre un pequeño escenario, que el Holocausto fue un shock terrible para la humanidad. La gente será realmente consciente de ello cuando quizá “ya no estemos aquí”.

(rmr/er)

Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos en Facebook | Twitter | YouTube |