Por Deutsche Welle |8 de enero de 2021, 10:38 AM

¿Dónde está Jadon Sancho? La pregunta puede parecer banal, si se mira a las cifras de competencia interna en el Borussia Dortmund. El británico no figura entre los principales anotadores, pero sí está presente como segundo mejor pasador a gol, con seis unidades. Sancho es de los ofensivos que más remates ha hecho al arco contrario (26), rubro en el que solo es superado por el noruego Erling Haaland (33).

A la hora de centrar al área enemiga, el mediapunta tampoco manifiesta timidez. Acumula ya 12 en lo que va del torneo, aunque está muy lejos de Thomas Meunier, que ya va en 33 flancos en busca de un remate.

Otras cifras son más traicioneras. El número 7 del Borussia Dortmund no figura en una lista que, para su posición, es fundamental.

En cuanto a distancia recorrida, ni siquiera llega a los cinco primeros lugares del club, mientras que Julian Brandt (con apariciones esporádicas) y Thomas Delaney rondan los 12 kilómetros de trayectoria por partido y encabezan esa lista.

Un dilema quijotesco

Pero más allá de los números, en esta temporada a Jadon Sancho le falta lo que le sobró en la anterior: brillo, audacia e inspiración. En una palabra, presencia. De él no se espera que sea sobre la cancha un Sancho Panza; es decir, hombre "de muy poca sal en la mollera”.

Hinchas y directivos anhelan verlo como un futbolista igual de ambicioso que el personaje cervantino, pero con la voluntad para acometer cualquier reto.

En cambio, el desempeño de quien el verano pasado fuera colocado por la rumorología en equipos como el Manchester United, ha quedado a deber: apenas un gol y seis asistencias, cuando en el torneo pasado alcanzó 17 de cada una.

En el año pandémico se extraña el liderazgo de Jadon Sancho, sobre todo en partidos cruciales que han alejado al Dortmund de la cima de la tabla general. Así, pues, ¿dónde esá Jadon Sancho?

Euros y molinos de viento

Con su habitual frialdad, el mercado futbolístico internacional ha registrado el cambio. Mientras que en marzo del año pasado Jadon Sancho era uno de los jugadores más valiosos del mundo, con una cotización de 130 millones de euros, ya en abril de 2020 su valor había descendido 13 millones de euros.

Desde entonces, la carta de Jadon Sancho no ha hecho más que bajar: en total, otros 17 millones de euros, para totalizar una abrupta caída de 30 millones de euros en menos de un año.

Las causas están, como gran parte de lo que sucede en el fútbol, en la mente. Hans-Joachim Watzke, presidente del Borussia Dortmund, externó al medio especializado Kicker una teoría sobre la baja de desempeño de Jadon Sancho: "Quizá sin haberse dado cuenta, Jadon se hizo a la idea de que cambiaría de club.”

Y fue más allá. "Antes, él no perdía tiempo en pensar qué haría con el balón. Ahora lo hace, y las décimas de segundo que acaban faltándole, son las que tarda un contrario en llegar a marcarlo”, afirmó el directivo.

Candidatos a Quijote

Es cierto que, en el partido anterior contra el Wolfsburgo, reapareció algo de la chispa que había caracterizado al escudero británico. Además de su único gol hasta ahora en el torneo, Sancho fue autor del saque de esquina con el cual Manuel Akanji abrió el marcador.

Pero a Jadon Sancho aún le falta salir de sí mismo, dejarse acompañar, encontrar su complemento y su propio ideal. Candidatos a Quijote hay muchos en el cordón ofensivo del Dortmund, desde su compatriota Jude Bellingham, hasta el estadounidense Giovanni Reyna o el veterano Marco Reus.

Por lo pronto, el Borussia Dortmund se verá las caras con la mejor defensiva del fútbol alemán: la del RB Leipzig. En esa circunstancia quedará claro si la mejora en el juego de Jadon Sancho es sostenible, o si el furor duró solo siete días. Tanto como el gobierno de la Ínsula Barataria en la inmortal novela de Cervantes.