Ganador del Premio Magón: "Es importante que la cultura reconozca el trabajo científico"
El científico José María Gutiérrez Gutiérrez fue galardonado por ser una autoridad en el campo de los antivenenos para mordeduras de serpientes.
Foto: A la izquierda, Bruno Lomonte, y a la derecha, José María Gutiérrez Gutiérrez.
El científico costarricense José María Gutiérrez Gutiérrez fue galardonado, este martes, con el Premio Nacional de Cultura Magón por ser una autoridad en el campo de los antivenenos para mordeduras de serpientes.
El jurado indicó que el doctor Gutiérrez es un ejemplo de excelencia y de constancia, por lo que este premio honra una excepcional trayectoria de trabajo orientada a construir, conservar y expandir la cultura científica, en Costa Rica y otras partes del mundo.
El científico conversó con Teletica.com sobre este reconocimiento y lo que significa para él.
"Este reconocimiento significa mucho, en términos personales es un gran honor, por supuesto, el Premio Nacional de Cultura Magón. También, es importante el hecho de que un premio de cultura reconozca el trabajo científico. Es decir, que se considere la Ciencia como parte de la cultura. De manera que este reconocimiento ayudará a que la Ciencia se vea como un componente creativo y de generación de conocimiento.
"Y me complace porque, además de mi persona, es un reconocimiento a un trabajo de muchas personas durante muchas décadas, que han buscado con sus recursos soluciones a un problema de salud pública como los envenenamientos de serpientes", indicó.
El doctor Gutiérrez lleva 47 años desempeñándose en esta área, en diferentes rangos como la investigación científica, desarrollo tecnológico, enseñanza y divulgación del conocimiento en la parte internacional.
Sus mayores logros
Según mencionó, sus mayores logros son la contribución para entender cómo actúa el veneno de serpiente en el organismo y cómo hace daño.
"He contribuido a desarrollar sueros antiofídicos para otras partes del mundo, me complace mucho la que hicimos para África subsahariana", agregó.
Brindó aporte como parte de un colectivo que buscaba incidir en la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que al tema de las mordeduras de serpientes se le diera más importancia.
Se pensionó hace tres años, pero se mantiene muy activo, ya es profesor emérito de la Facultad de Microbiología de la Universidad de Costa Rica, apoya actividades académicas y de investigación del Instituto Clodomiro Picado y sigue desarrollando vínculos de cooperación internacional.
