Por Juan José Herrera |26 de noviembre de 2021, 17:31 PM

Ómicron, la nueva variante del coronavirus, podría ser más contagiosa que la mutación Delta e incluso ser más resistente a las vacunas o las infecciones previas.

Así lo aseguraron los epidemiólogos Ronald Evans y Juan José Romero, quienes coincidieron en que la decisión de la comunidad científica internacional de declararla como una “variante de preocupación” fue acertada.

“Nos hablan de una variante multimutante que especialmente en el sitio de unión con el organismo lo que la hace muchísimo más fácil de infectar y por lo tanto transmitirse de persona a persona.

“Tiene otras mutaciones que podrían producir lo que se llama el escape inmunológico, o sea que los anticuerpos que se han producido producto de la vacunación o infecciones previas no funcionan con la misma eficacia que variantes previas, pero esto podría ser muy prematuro porque no hay suficiente investigación al respecto”, dijo Romero, experto de la UNA.

Evans, por su parte, aseguró que las autoridades están “investigando a capacidad máxima”, pero todavía es prematuro para sacar conclusiones definitivas.

“Hay preocupación mundial, pero todavía es muy prematuro para medir las consecuencias que podría tener en el futuro esta mutación. Se está investigando a capacidad máxima, pero todavía no se puede causar alarma en la población de que se va a desatar una pandemia y que las vacunas van a ser inefectivas, eso no se puede asegurar y no se sabe si su capacidad de contagio será mayor o no a Delta, o si será capaz de inhibir el efecto protector de las vacunas”, añadió.

En un informe de evaluación de riesgos, el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) señal que sigue habiendo una "incertidumbre considerable respecto a la transmisibilidad, la eficacia de las vacunas, el riesgo de reinfección y otras características de la variante ómicron".

Puesto que cabe la posibilidad de que las vacunas actuales no protejan contra esa variante y puesto que ómicron podría ser más contagiosa, "juzgamos alta la probabilidad de nuevas llegadas e infecciones a la UE y en el EEE", indicó la agencia, que tiene sede en Estocolmo.