La desesperación del portero que ostenta el peor récord individual de la Liga de Campeones
La lucha de goles entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo suele opacar otras marcas individuales que se logran en la Champions, pero hay una en particular que está acaparando la atención en el fútbol europeo.
Por un momento se pensó que lo lograría, pero no pudo hacerlo.
Al portero ruso Igor Akinfeev le faltaron sólo tres minutos para cortar la que se considera la peor racha negativa en la historia de la Liga de Campeones: los 10 años que lleva recibiendo por lo menos un gol en cada uno de los partidos que ha jugado en la Liga de Campeones.
Pero el tanto de Bernardo Silva en el empate del Mónaco frente al CSKA acabó con el desesperado intento de Akinfeev, quien no pudo evitar mostrar su frustración en el campo al darle golpes al terreno de juego.
La última vez que la leyenda del conjunto moscovita logró terminar un partido con su valla en cero fue el 1 de noviembre de 2006 frente al Arsenal inglés.
Desde entonces el CSKA ha recibido 89 goles en los 47 partidos jugados, aunque Akinfeev sólo es responsable de los tantos recibidos en 40 de esos encuentros.
Es tan mala su suerte que pese a tener casi 500 apariciones con la camiseta del CSKA, equipo en el que debutó a los 16 años, el portero ruso no pudo jugar en los únicos dos encuentros en los que su equipo no recibió goles en los últimos diez años en la Champions.
Fue en la temporada 2011-2012 cuando el CSKA empató de visita 0-0 frente Trabzonspor turco y consiguió una clara victoria 3-0 en Moscú contra el mismo equipo.
La racha de Akinfeev podría terminar este miércoles, justo un día después de cumplirse el décimo aniversario de la última vez que pudo retirarse del campo con su valla invicta.
Será en la visita al principado de Mónaco, pero las probabilidades juegan en su contra.
El conjunto local lidera el grupo E de la Champions y hasta ahora ha marcado en todos los partidos que ha disputado esta temporada como local, sea en el torneo internacional o en la liga francesa.
De hecho, la única vez que no pudo ver puerta fue en su visita a Niza, el pasado 21 de septiembre.