POR Teletica.com Redacción | 15 de junio de 2018, 5:14 AM

Ocho oficiales del Ministerio de Seguridad Pública, entre ellos tres con cargos de jefatura, deberán cumplir medidas cautelares a solicitud de la Fiscalía del I Circuito Judicial de San José, luego de una audiencia realizada la noche del jueves en el Juzgado Penal de la localidad.

Ellos serán separados de los puestos que ocupaban y trasladados a otra zona, donde no tendrán personal a su cargo; además, deberán firmar una vez al mes y tendrán prohibición de acercase a Hatillo o Desamparados.

Tampoco podrán perturbar o amenazar a ofendidos o testigos del proceso y las medidas cautelares tendrán un plazo de seis meses.

Un noveno imputado, de apellidos Guzmán Badilla y también funcionario del Ministerio de Seguridad Pública, fue detenido a las este jueves en Limón y, posteriormente, se le trasladó hasta la Fiscalía del I Circuito Judicial en San José, donde se le tomó la declaración indagatoria y en las próximas horas se solicitará que se le imponga las mismas medidas cautelares.

Los demás sospechosos responden a los apellidos Monestel Navarro, jefe de la Unidad Especializada de Seguridad y Protección; Anchía Céspedes y Aponte Quirós, respectivamente, jefe y oficial superior de la Unidad de Intervención Policial; y los oficiales del grupo “Linces” Cortés Matarrita, Acuña Carvajal, Mantus Reyes, Cascante Amador y Rodríguez Guzmán.

Los casos

Dos jefes del grupo especial conocido como Linces, así como siete subalternos, fueron detenidos por la fiscalía del primer circuito judicial y agentes de delitos varios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).

El Ministerio Público los investiga por los delitos de allanamiento ilegal, abuso de autoridad e incumplimiento de deberes.

El primero de los hechos ocurrió 11 de mayo del 2017 en Torremolinos de Desamparados, cuando los oficiales ingresaron a dos viviendas y en una de ellas forzaron el cerrojo, para luego inmovilizar a los ofendidos y registrar los aposentos.

El segundo ocurrió el 8 de octubre en la ciudadela 25 de Julio, en Hatillo, donde los imputados ingresaron a 30 apartamentos sin el consentimiento de los propietarios y se llevaron detenidas a cuatro personas, a quienes se sospecha que agredieron.