POR Eric Corrales | 16 de julio de 2023, 11:49 AM

El equilibrio entre el pH, las bacterias, la humedad y las hormonas en la vulva y la vagina son sumamente importantes para la salud vaginal de las mujeres. Por ello, es importante conocer que existen factores que pueden alterar este equilibrio, como los cambios hormonales, las prácticas de higiene, las relaciones sexuales, los medicamentos, el peso corporal y los anticonceptivos, entre otros.

Ante esta situación y reconociendo la importancia de la salud íntima en la vida de las mujeres, expertos de Saba® le brindan información sobre el órgano femenino y el ecosistema vaginal.

De acuerdo con el estudio Taboo Tracker, una de cada cinco mujeres asegura haber sufrido de sensibilidad cutánea en la zona íntima, una de cada cuatro afirma haber sentido vergüenza e incomodidad de pedir ayuda y una de cada tres mujeres está de acuerdo en que la piel íntima sensible a menudo se considera erróneamente como resultado de una limpieza antihigiénica o una enfermedad sexual. 

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Adicionalmente, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (Sego), indicó que el 75% de la población femenina alrededor del mundo experimentarán alguna infección vulvovaginal en algún momento de sus vidas, las cuales pueden ser causadas por diversos irritantes y alérgenos, como jabones demasiado fuertes, residuos de papel higiénico, reacciones a ciertos materiales en condones o lubricantes personales, así como el uso de ropa interior ajustada de nylon y algunos detergentes para la ropa.           ​ ​ 

Según comentó la doctra María del Pilar Navas, médico especialista en ginecología, “los síntomas más comunes de una afección inflamatoria de la vulva son la picazón y el dolor. Además, aproximadamente el 30% de las mujeres que buscan atención médica por síntomas relacionados con la vulva presentan dermatitis de contacto, lo cual puede convertirse en un problema crónico”.

Además de esto, es importante tener en cuenta varias recomendaciones, como usar ropa interior de algodón, utilizar jabones con un pH adecuado para la higiene íntima, evitar el uso de ropa interior y prendas muy ajustadas, y asegurarse de cambiarse la ropa húmeda después de visitar el mar, la piscina o hacer ejercicio en el gimnasio. Estas medidas ayudan a mantener un entorno favorable en la zona vulvovaginal, reduciendo el riesgo de infecciones.