POR AFP Agencia | 9 de septiembre de 2019, 1:57 AM

A los 47 años, la leyenda del surf de los 11 títulos mundiales, Kelly Slater, decidió abrir un nuevo capítulo en su carrera e intentar clasificarse para los Juegos de Tokio, en los que su disciplina debutará en el programa olímpico.

Convertirse en el primer surfista campeón olímpico. Un desafío que motiva al veterano estadounidense, que desde el martes participará en el Mundial 2019, en Miyazaki (Japón). Una cita imprescindible en la ruta hacia los Juegos en la que no participa desde hace casi tres décadas.

Para formar parte de la fiesta olímpica hace falta clasificarse, pero también participar en el Mundial 2019 o en la cita de 2020, un evento secundario para las estrellas del circuito profesional.

Aunque Slater no ha decidido si va a volcarse para entrar en los Juegos, tampoco quiere quedarse fuera de juego.

"Me parece que debo surfear en esta competición porque si no podría quedar descalificado", señaló a mediados de julio Slater, tras su eliminación en la etapa del circuito profesional de Sudáfrica, añadiendo que sus ganas de buscar la clasificación estaban "al 50%".

"Por el momento me concentro en esto, mi prioridad es regresar a la élite del circuito mundial", señaló el mejor surfista de todos los tiempos, que entró en la historia al proclamarse campeón del mundo con 20 años en 1992 -el más joven en lograrlo-, pero también a los 39 en 2011 -el de más edad en conseguirlo-.

- Regreso a Miyazaki -

"Comencé el año metiéndome mucha presión para formar parte del equipo olímpico pensando que, quizás, me retiraría el año próximo y sería el final para mí. Eran demasiadas cosas en mi cabeza y no quiero pensar tanto ahora", explicó.

Las dos últimas temporadas del surfista de Florida han estado lejos de ser brillantes. Sufrió problemas de espalda y se lesionó en un pie, perdiéndose 13 etapas del circuito profesional (CT) de la World Surf League (WSL).

Actualmente ocupa la décima posición de la clasificación Mundial, por detrás de otros dos estadounidenses, Kolohe Andino (3º mundial) y John John Florence (5º).

Diez de los veinte billetes olímpicos irán para el Top-10 de la clasificación mundial, con dos deportistas como máximo por país.

Pero Florence, lesionado en julio y baja hasta el final de la temporada, permite a Slater contar con opciones de acudir a Tokio 2020.

Con este espíritu Slater regresa a tierras niponas. Su última participación en el Mundial, organizado por la Federación Internacional de Surf, fue en 1990, precisamente en Miyazaki. Entonces no fue capaz de alcanzar el podio, finalizando quinto.

Esta vez quiere metal, aunque para sus aspiraciones olímpicas lo esencial es que la leyenda vuelva a competir.