POR Susana Peña Nassar | 8 de enero de 2022, 10:38 AM

Proyecciones de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) indican que, durante la segunda semana de enero, los casos diarios de COVID-19 podrían alcanzar los 5.100 debido a la variante Ómicron.

El presidente ejecutivo de la institución, Román Macaya, advirtió este sábado que Costa Rica está atravesando "un territorio nuevo en esta pandemia", al referirse a la velocidad con la que avanza la nueva cepa del coronavirus.

"La variante Ómicron no solo está presente en Costa Rica, sino que se volvió dominante en el país en un tiempo récord: desplazó a la variante Delta en menos de tres semanas, como la variante dominante, y eso es un reflejo de lo contagiosa que es y la velocidad con la que se puede propagar", dijo el jerarca en conferencia de prensa. 

"Lo que se proyecta es que, en esta segunda semana de enero, vamos a estar llegando a niveles de más de 5.000 casos diarios de COVID-19 por variante Ómicron", agregó.

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Territorio nuevo

Macaya se refirió a la tasa de reproducción del virus, llamada "R", que refleja a cuántas personas contagia una misma persona enferma. En menos de dos semanas, el país pasó de un indicador "ideal" a uno alarmante. 

"Pasamos 93 días por debajo de uno, que es donde quisiéramos estar: significa que la pandemia va hacia la baja, cada vez hay menos contagiados y eso se refleja en los hospitales. Pero vean lo que ha pasado en los últimos 11 días: estamos en un "R" de 2.6: esto es territorio nuevo, nunca hemos tenido un "R" tan alto ni que llegáramos a ese "R" tan rápido", explicó el presidente de la CCSS. 

"Eso lo que nos alerta es que vamos aún a mayores contagios", añadió durante una intervención virtual. Además, pidió a los ciudadanos no confiarse ante la posibilidad, señalada mundialmente, de que se trate de una mutación "menos agresiva".

La institución teme que esa velocidad de contagios alcance al personal sanitario, lo que podría disminuir la oferta de servicios de la CCSS. Por eso, hace un llamado para extremar las medidas preventivas (lavado de manos, uso de mascarilla y mantener el distanciamiento) sin descuidar el avance de la vacunación.

Plan institucional 

El doctor Randall Álvarez, gerente médico de la CCSS, detalló el plan de acción ante el escenario descrito anteriormente.

En el nivel local, áreas de salud, se definió una estrategia para facilitar el acceso a las pruebas de laboratorio. "El diagnóstico oportuno nos va a ayudar a realizar, de manera adecuada, las acciones de vigilancia epidemiológica, orientadas precisamente a tratar de disminuir el contagio", resaltó el médico.

Según el gerente, la CCSS fortalecerá las consultas diferenciadas en sus servicios de Emergencias y el seguimiento a los pacientes positivos, esto último por medio del Cendeisss. También hay mecanismos definidos para realizar contrataciones de personal, en caso de ser necesario y ante el riesgo de que se incrementen las incapacidades. 

El sector salud, por el momento, planea mantener un balance entre la atención COVID-19 y no COVID-19.

"La estrategia consiste en que, con base en las nuevas condiciones, se pueda dar una ampliación y un aumento de camas de acuerdo con lo que se está necesitando, con la diferencia de que se basa, en primera instancia, en las capacidades de respuesta de la red de servicios y enfocada dentro de la atención ordinaria de los centros hospitalarios", manifestó Álvarez.

En caso de ser necesario, el Hospital Calderón Guardia habilitaría más espacios para la atención de diagnosticados con coronavirus en todo el país. 

Actualmente, la CCSS reporta una ocupación del 53% en Unidades de Cuidados Intensivos y 43% en sus salones generales: en números reales, eso significa 50 pacientes en camas UCI y 119 en salón.

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