POR Teletica.com Redacción | 17 de septiembre de 2025, 13:13 PM

Las hernias gigantes son una condición compleja que genera dudas y temores en pacientes y familiares. De ahí la importancia de la prevención, el diagnóstico oportuno y el seguimiento médico de por vida (ver video adjunto).

Mito o verdad: ¿Las hernias gigantes pueden reaparecer a pesar de la cirugía?

Verdad. Las hernias gigantes pueden regresar por diferentes factores, incluso con cuidados correctos y siguiendo todas las recomendaciones médicas. La clave está en operar a tiempo y no dejar que alcancen un tamaño complejo.

Mito o verdad: ¿Las mujeres son más propensas a hernias gigantes?

Mito. Tanto hombres como mujeres pueden desarrollar hernias, sin predilección de género en los casos gigantes. Factores como cirugías previas, enfermedades crónicas o complicaciones abdominales influyen más que el sexo del paciente.

Mito o verdad: ¿Una hernia gigante puede convertirse en un tumor?

Mito. Aunque se perciban como abultamientos, las hernias no se transforman en tumores ni desarrollan células cancerosas.

Mito o verdad: ¿La cirugía es de alto riesgo y puede afectar a algunos órganos?

Mito. Se considera una cirugía mayor, pero los riesgos se reducen gracias a una preparación integral que incluye estudios médicos, terapias y, en algunos casos, el uso de toxina botulínica antes del procedimiento.

Mito o verdad: ¿La alimentación influye en la aparición de hernias gigantes?

Mito. No hay relación directa, aunque siempre se recomienda una dieta balanceada, baja en grasas y carbohidratos.

Mito o verdad: ¿Las personas con hernias gigantes sufren secuelas en la salud mental?

Mito. No dejan secuelas psicológicas directas, pero la calidad de vida sí puede verse comprometida antes de la cirugía, lo que puede generar afectación emocional.

Mito o verdad: ¿Los pacientes requieren tratamiento y revisión de por vida?

Verdad. Tras la cirugía, los pacientes deben acudir a controles periódicos, al menos cada seis meses o una vez al año, pues existe la posibilidad de recurrencia.

Con información clara y cuidados adecuados, los pacientes pueden recuperar su calidad de vida y minimizar el riesgo de complicaciones a futuro.