Por Luis Jiménez |22 de enero de 2021, 11:25 AM

La Municipalidad de Curridabat da seguimiento a la muerte de un gato en el cantón. En apariencia, una vecina le habría pedido a un sujeto deshacerse del animal que estaba en celo, pero él mató a uno equivocado.

Los hechos ocurrieron este jueves en Lomas de Ayarco Sur, San José. 

Una vecina solicitó a trabajadores municipales que rescataran un gato que, supuestamente, había sido lanzado al río dentro de un saco.

“Presuntamente, la situación se originó en una solicitud de una vecina a un tercero para que se deshiciera de una gata en celo; sin embargo, el perpetrador se habría confundido de animal. Cuando los funcionarios municipales llegaron al río el gato ya estaba muerto”, dijo Sofía Pérez, jefa de Ambiente y Salud de la Municipalidad de Curridabat.

Según la funcionaria, este jueves acompañaron a la familia afectada a interponer una denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) para que investigue la supuesta muerte animal. Al parecer, tienen identificados a los responsables.    

“Estas situaciones nos provocan mucha indignación. El intento de abandonar un gato también es un delito. Queremos que el OIJ aclare lo acontecido para dar paso a que se sienten las responsabilidades que corresponda”, añadió Pérez.

También comentó que la Municipalidad de Curridabat cuenta con servicios de atención animal, por lo que bastaba con solicitar la intervención municipal para buscar una solución al problema, que podría ser desde la castración hasta la adopción de la mascota.

La Ley Contra el Maltrato Animal castiga hasta con dos años de cárcel a quien es encontrado culpable de lastimar o matar a un animal.  

Otro caso

Este jueves, la Fiscalía Adjunta del II Circuito Judicial de San José acusó al sospechoso de lanzar a un gato desde un balcón. La acusación contra el hombre, de apellidos Saborío Soto, es por el presunto delito de muerte animal. 

Este caso se remonta a noviembre de 2019, pero se dio a conocer a través de las redes sociales en agosto de 2020.

Los hechos ocurrieron en una torre de apartamentos ubicada en Granadilla de Curridabat, cuando el sujeto lanzó al animal desde un balcón que estaba a una altura de 28 metros.