Por Christian Montero |23 de noviembre de 2020, 20:56 PM

Una sala de masajes y spa al parecer era usada con fines de explotación sexual y laboral en perjuicio de varias jóvenes.

El local comercial que se ubica en Rohrmoser fue allanado por la sección especializada en violencia de género y trata de personas del OIJ la tarde de este lunes.

Mientras que en Hatillo 8, agentes judiciales ingresaron de forma simultánea a la casa de la dueña del establecimiento comercial.

La mujer de apellidos Castillo Castro es investigada por el presunto delito de trata con fines de explotación sexual y laboral.

Presuntamente, la sospechosa ofrecía en páginas de Internet trabajo a mujeres interesadas en desempeñarse como recepcionistas.

Pero, la investigación determinó que las jóvenes eran ofrecidas para servicios sexuales.

Según trascendió, por cada presunto encuentro sexual las mujeres cobraban 35 mil colones y recibían 10 mil colones de pago.

Además, debían trabajar extensas jornadas.

Al momento de allanar la sala de masajes las autoridades encontraron a una persona menor de edad.

La investigación de este caso inició desde mediados de este año.