Joven víctima de caída de portón: "Llevaba malo varios días y no lo habían querido arreglar"

Raquel Vargas Allard, de 20 años, fue la joven a quien le cayó el portón principal de una escuela en Coronado el pasado 21 de setiembre. 

Vargas conversó con Teletica.com para exponer su visión de los hechos. Durante la entrevista, lo primero que aseguró es que el portón estaba malo desde dos semanas antes del accidente y que, pese a que el centro educativo ya lo sabía, todavía no lo había arreglado. 

"Yo estoy muy impactada, sigo sin creerlo. Para mí es negligencia totalmente porque pudieron haber arreglado el portón desde antes, llevaba malo bastante rato y no lo habían querido arreglar. Se esperaron a que pasara lo peor", contó la joven. 

Vargas trabaja como ayudante de buseta en el centro educativo, y ya había reportado el peligro que el portón dañado representaba para los estudiantes y adultos.

En las últimas declaraciones que proporcionó el Ministerio de Educación Pública (MEP) al respecto, la entidad indicó que había conversado con los involucrados para conocer su estado de salud, pero no se refirió a los fallos en la infraestructura. En el comunicado, se limitó a decir que el accidente había sido un hecho "fortuito".

Ante la duda, Teletica.com consultó a la oficina de prensa del MEP sobre el hecho que expuso la afectada, quien indicaba que el portón había estado malo durante al menos dos semanas previo al accidente y que el centro educativo estaba al tanto de ello. Sin embargo, al cierre de esta edición, la entidad no había enviado una respuesta.

"No me acuerdo nada de ese día"

Para Vargas, ese miércoles quedó borrado de su memoria. Pese a que inició su día como cualquier otro, sus nulos recuerdos no le permiten ilustrar qué fue lo que ocurrió.

"Yo no me acuerdo de absolutamente nada de ese día. Mis recuerdos empiezan como a las 6 p. m. No me acuerdo de haberme levantado, de haber ido a la escuela, de nada.

"Yo veo el video y las fotos y lo que pienso es: 'Por Dios, ¿esa fui yo?'. Si no me viera en el video yo diría que no soy yo porque no me acuerdo de eso", dijo. 

Esa tarde, se despertó en el Hospital Calderón Guardia, donde le informaron sobre lo que había ocurrido y sobre la cirugía de seis horas a la que tuvieron que someterla producto del golpe.

"El portón me dio en la cabeza y se me rajó una parte de la frente, desde la mitad hasta la oreja casi. Hoy fui a una cita en el hospital y uno de los doctores que me operó me dijo que era un milagro que yo estuviera viva, porque se me veía el hueso y tenía toda la piel desprendida", relató a este medio.

Durante su proceso de recuperación, ha sufrido fuertes episodios de dolor en la cabeza, cuello, espalda, brazos y piernas, lugares donde también le han salido grandes moretes producto del accidente.  

Vargas Allad se mantiene incapacitada.