Dueño de propiedad invadida por precaristas en La Carpio debe cercar terreno tras orden municipal

Tras el desalojo de unas 2.000 personas de una propiedad en La Carpio, las autoridades municipales piden al dueño que tome medidas para evitar una nueva invasión de precaristas.  El dueño ahora tendrá que cercar el terreno tras una orden de la municipalidad.

Las familias ingresaron a este terreno semanas atrás y se dividieron el lote con el fin de empezar a construir ranchos de manera informal en tierras que no les pertenecen. 

“Ahora la municipalidad realizará dos procesos en paralelo, uno es una notificación para los dueños la cerquen para evitar que sea de nuevo invadida y dos, para que los dueños limpien el terreno y no exista una contaminación ambiental en esa zona, que ya de por sí está muy afectada”, explicó Marcelo Solano, director de la Policía Municipal de San José (PMSJ).

La propiedad, de unos 47.000 metros cuadrados, está inscrita a nombre de un costarricense de apellidos Beckles Bonilla.

“Los argumentos de los vecinos para irrumpir en la propiedad es decir que tiene muchos años de estar sin uso, realmente eso no le da permiso a nadie de infringir en la propiedad privada ni disponerla para sus negocios”, dijo Solano.

Al parecer, una tercera persona, ajena a la propiedad, se habría aprovechado de las familias pidiéndoles una suma de dinero para poder ingresar al lote.

“Algunas personas decían haber pagado una suma de dinero a terceros para tener el derecho de poder participar de la invasión y ahora están preocupados porque se quedaron sin el pedazo de tierra que, aparentemente, habían comprado, por lo que ahora denuncian haberse quedado sin los recursos”, agregó el jerarca.

El desalojo en lo que se llamó “La Nueva Carpio” se realizó como parte de un procedimiento administrativo con el fin de evitar que se consolidara un nuevo precario.

Según las autoridades, en muchos casos son grupos criminales los que promueven este tipo de invasiones.

“Grupos delincuenciales promueven la invasión de tierras para generar un anillo de seguridad precarizado que evite y dificulte el acceso de la policía para generar este control; ocurre en muchas comunidades en situación de precario en donde se ubican múltiples puntos de tráfico y consumo de drogas y se mimetizan ranchos de precarios donde viven familias con ranchos dedicados al tráfico de drogas. Entonces ocurre una protección natural de la comunidad que se debe a los autores intelectuales que promovieron la invasión”, concluyó Bonilla.

Solo en San José, se registran 54 precarios, la mayoría ubicados en terrenos que le pertenecen al Estado.