Por Yahaira Piña |26 de septiembre de 2020, 19:03 PM

Un grupo de 30 voluntarios retomó este sábado la búsqueda de los posibles restos de la joven Allison Bonilla en un botadero clandestino ubicado en San Jerónimo de Cachí, en Cartago.

Una de las voluntarias sufrió un incidente durante las labores y fue necesario que parte del equipo se concentrara en ayudarla a subir.

Este lunes, el caso podría dar un nuevo giro.

Nelson Sánchez Ureña, el principal y único sospechoso de asesinar a Allison, cambiará su versión de los hechos en una nueva indagatoria, que tendrá lugar a las 7:30 de la mañana en los tribunales de San José.

Según el abogado del sospechoso, su cliente fue víctima de presiones psicológicas y "torturas" por parte de las autoridades cuando tuvo su primera audiencia en la Fiscalía.

Durante la última semana un grupo de personas ha peinado las orillas del embalse de Cachí y otros puntos.

La familia de Allison tiene la esperanza de que esta nueva búsqueda les ayude a obtener respuestas sobre el paradero de la joven.