Citas pregestionales: la clave para proteger a las embarazadas mayores de 35 años
En Costa Rica hay cada vez más mujeres quedando encintas en edades avanzadas, exponiéndose a diversas complicaciones que pueden preverse asistiendo a estas citas antes de quedar embarazadas.
Cada vez son más frecuentes los casos de mujeres mayores de 35 años que quedan embarazadas de su primogénito.
Este hecho no deja de ser llamativo, ya que corresponde a la franja de edad que los expertos catalogan como la más propensa a posibles riesgos gestacionales.
Asimismo, además de ser un fenómeno que desde hace algunos años también se ha pronunciado en otros países del mundo, es un reflejo de que hay cada vez más mujeres dispuestas a cumplir su sueño de maternidad pese a tener una edad más avanzada.
Karla Gríos, coordinadora del programa de Atención a la Mujer de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), indica que, desde su experiencia profesional, ha podido comprobarlo: cada vez son más frecuentes las visitas de pacientes que quedan encintas con edades que superan los 35 años.
"La percepción que tengo es que hay muchas mujeres que están retrasando la maternidad. Me imagino que puede deberse a proyectos de vida que tienen ahora las mujeres y que tienen muchos retos en su desarrollo personal y profesional, lo que implica un retraso en el deseo de ser madre", explicó.
La doctora incluso cuenta que ha recibido pacientes embarazadas de hasta 48 años, una tendencia que ha hecho que las autoridades recuerden con mayor ahínco a la población sobre los riesgos que implica este proceso y, además, sobre la importancia de las citas pregestacionales en estos casos.
Estas citas, que ocurren antes del embarazo, son fundamentales para detectar indicios de posibles padecimientos que surgen durante la gestación en edades más avanzadas, tales como el riesgo de un parto prematuro, de la preeclampsia (una complicación que ocurre en hasta un 10% de los embarazos y produce un aumento en la presión arterial que puede llegar a afectar el suministro de sangre a la placenta), cuadros de presión alta y diabetes gestacional, entre otros.
"Estas usuarias muchas veces no van a una consulta preconcepcional, que sería lo ideal antes de quedar embarazadas. Nosotros usualmente las recibimos ya embarazadas, sin haber tenido una adecuada consejería antes de la gestación. Ahí se le puede informar sobre los factores de riesgo asociados por la edad o por las comorbilidades asociadas", añadió Gríos.
Esta situación se agrava debido al hecho de que, a estas edades, muchas mujeres ya padecen de enfermedades asociadas, algo que complica aún más el embarazo.
Según los médicos, esta atención debe programarse al menos tres meses antes de querer quedar embarazada y se debe solicitar en el primer de atención.
"Si es necesario, será referida al segundo nivel de atención para una consulta con Obstetricia", añadió.
