Pasajes, alimentos y agroquímicos: una cadena de aumentos por el precio de los combustibles
Costa Rica ocupa el primer lugar en la lista de países de Centroamérica con el impuesto más alto a los combustibles.
Los consumidores no solo enfrentan un golpe en su bolsillo por las gasolinas y el Diésel, también por tres bienes o servicios que aumentan su costo de manera inmediata cuando suben las tarifas de los combustibles.
En primer lugar, el servicio de transporte público. Por ejemplo, la tarifa del bus de San Antonio de Escazú costaba ₡560 hace un año. Hoy vale ₡675, es decir, un solo pasaje vale ₡115 más. Los pasajes a Alajuela costaban ₡675 en agosto 2021 y ahora ₡740: ₡65 adicionales.
Las tarifas de autobús han subido tres veces en el último año. Además, la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) aprobó un nuevo aumento de ₡70 en las tarifas de los taxis, subiendo el costo del primer kilómetro a ₡910.
Además de cualquier tipo de transporte, los agroquímicos también suben de precio cuando se incrementan las tarifas de los combustibles; así como el precio de la canasta básica, que sube al ritmo más acelerado de los últimos 13 años.
Aunque el precio del combustible es tan alto, en este momento, por factores internacionales, lo cierto es que hay un factor propio en el país que eleva el precio y que no tiene nada que ver con la guerra: el impuesto que pagamos por cada litro de gasolina Súper, Regular o Diésel.
De hecho, Costa Rica ocupa el primer lugar en la lista de países de Centroamérica con el impuesto más alto a los combustibles. En el segundo lugar está Guatemala, en el tercero Nicaragua, en el cuarto El Salvador, en el quinto Honduras y Panamá en el sexto.
En medio de esta crisis, otros países han congelado las tarifas desde hace meses. Al respecto, la Casa Presidencial asegura que prepara una propuesta para congelar el precio, al igual que las otras naciones centroamericanas.
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