Por Álvaro Sánchez |21 de octubre de 2021, 8:05 AM

En la entrega de ayer mostramos cómo, con una cámara oculta, un equipo de Telenoticias ingresó a una propiedad a la altura de Batán en la Ruta 32 para realizar algunas compras y comprobar si de este lugar salía, ilícitamente, una parte del combustible que grupos delictivos sustraen del poliducto de Recope.

El equipo de investigación consiguió comprar una pichinga de combustible por 10 mil colones. Luego, llevó la muestra a un laboratorio de Recope, donde se pudo comprobar que la mezcla contenía diesel y gasolina de avión tipo jet A1 mezclada con queroseno.

Investigaciones de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS) han detectado que el robo de combustible también es utilizado para abastecer las embarcaciones y aeronaves que usan grupos narcotraficantes para movilizar droga. 

Según los datos de Recope, el año pasado se detectaron 356 tomas ilegales a lo largo de los 533 kilómetros de tubería en el país. La mayoría de ellos, ubicados en la zona Atlántica costarricense. Gran parte de estas tomas clandestinas están ubicadas en Batán y en Turrialba.

En el video adjunto, se repasan las penas por participar en esta modalidad delictiva y se muestra el modus operandi, en primera mano, de estos grupos que se dedican a vender combustible ilegal sobre una de las rutas más transitadas por los costarricenses.

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